La Organización Mundial de la Salud (OMS) planteó eliminar el mercurio de todos los dispositivos médicos de medición para 2020. “El mercurio y sus diversos compuestos constituyen un importante problema de salud pública a nivel mundial y tienen una serie de efectos graves en la salud, como daños cerebrales y neurológicos, sobre todo entre los jóvenes. También puede provocar daños en los riñones y en el aparato digestivo”, afirmó la OMS.
Las formas mas usuales de usar el termómetro de mercurio en los humanos es colocándolo debajo de la axila, boca o de manera rectal, y de este modo, se mide la temperatura corporal. La punta este dispositivo cuenta con mercurio elemental (metálico).
“La exposición al mercurio, incluso a pequeñas cantidades, puede causar graves problemas de salud y es peligroso para el desarrollo intrauterino. En las primeras etapas de vida puede ser tóxico para los sistemas nervioso e inmunitario, el aparato digestivo, la piel y los pulmones riñones y ojos”.
Cuando se rompe un termómetro de cristal y el mercurio no se destruye, éste se esparce por la casa a medida que caminamos, barremos o aspiramos, formándose una amenaza latente para la salud.
Muy pronto este dispositivo, que por mucho tiempo sirvió para uso médico, será sustituido definitivamente por tecnología digital.
Con información de OMS