Redacción El Piñero | Corresponsalía
Oaxaca.- El gobernador de Oaxaca, Salomón Jara Cruz, se encuentra en el centro de una tormenta política después de negarse a aceptar la salida del director del Hospital de la Niñez Oaxaqueña, Ricardo Ríos López. La decisión de remover a Ríos López llegó desde la capital del país, tras señalamientos diversos que han generado un gran revuelo en la comunidad médica de Oaxaca.
Según fuentes cercanas al gobierno estatal, Jara Cruz considera que la salida de Ríos López es una “acción política” de los trabajadores del hospital, y ha advertido que no permitirá que se lleve a cabo. Sin embargo, esta decisión ha generado un gran debate en la opinión pública, ya que se considera que la gestión de Ríos López ha sido cuestionada por su posible relación con intereses políticos y económicos que han afectado la transparencia y eficiencia del hospital.
El Hospital de la Niñez Oaxaqueña ha sido objeto de diversas críticas y denuncias en el pasado, incluyendo un desmantelamiento de la institución y un claro conflicto de interés. A pesar de esto, Jara Cruz se aferra a mantener a Ríos López en su cargo, lo que ha generado un gran malestar