*Uno paso de carnicero a sicario y el otro se unió al crimen organizado tras haber sido un conocido empresario y miembro del jet set veracruzano
*El H y El Quino, los capos que tenían asolado Veracruz El Gobierno federal logró neutralizar este junio a los capos conocidos como El H y El Quino
Ciudad de México.- El Gobierno federal logró neutralizar este junio a dos capos del crimen organizado que tenían asolada la zona centro y sur del estado de Veracruz y que, según reporte de las mismas autoridades, son los autores intelectuales de cientos de asesinatos en los últimos seis años.
Se trata de Ricardo Pacheco Tello, alías el Quino, jefe de plaza del Cartel de Jalisco Nueva Generación, en la entidad veracruzana, muerto en un enfrentamiento con la Marina-Armada de México, en la comunidad de Chipilo, Puebla.
El otro es Hernán Martínez Zavaleta, alias el Comandante H, detenido el 30 de junio en la ciudad de Villahermosa, Tabasco. A él se le señala como Jefe de Plaza de los Zetas en el sureste del país.
Las autoridades emprendieron una cacería contra ambos luego de las muertes de dos mandos de la Policía Federal, en Ciudad Cardel, en La Antigua, y del homicidio de una familia en Coatzacoalcos, en donde fallecieron cuatro niños.
De carnicero a sicario
Comerciantes del Mercado Hidalgo, es más popular de la ciudad de Veracruz, relataron de manera anónima que Ricardo Pacheco Tello no siempre fue una persona de mal.
Aunque no precisan fechas, calculan que cerca del 2010, el entonces joven trabajaba como carnicero en el negocio familiar hasta que su padre fue privado de su libertad por una célula de Los Zetas, quienes tenían el control del estado.
Tras la muerte del señor, se dice que el Quino juró venganza y dejó a un lado su oficio de carnicero para aliarse al Cartel de Jalisco Nueva Generación, que disputaban la plaza en esos tiempos.
Bajo las órdenes de Carlos Carranza Saavedra, alias el Ñaca, exagente de Tránsito en la ciudad de Veracruz, inició su vida criminal, subiendo de inmediato escalafones en el organigrama de la banda.
Pacheco Tello habría obtenido el mando de la plaza en el estado luego de que Carranza cambiara de residencia a Jalisco, en donde murió en un tiroteo en el 2013.
Una vez empoderado, El Quino se hizo famoso por su extrema violencia. Por medio de cartas en redes sociales lo acusaban de mandar a asesinar a cientos de personas entre ellas los cinco jóvenes desaparecidos en Tierra Blanca, a principios del 2016, y la de tres jóvenes que estudiaban en la Universidad Veracruzana.
Durante 2016, un grupo denominado “Jarochos Unidos” le disputó la plaza de la zona conurbada, pero según consta en notas locales, los integrantes de esa célula fueron asesinados por los sicarios del Cartel de Jalisco.
Al Quino también se le achaca los 11 cuerpos arrojados este 2017 en calles de la ciudad de Boca del Río y otros más desmembrados afuera de la oficina particular del Secretario de Seguridad Pública estatal, Jaime Téllez Marié.
Según el Gobernador, Miguel Ángel Yunes Linares, el capo ordenó la muerte del coordinador de la Policía Federal en el estado, Juan Camilo Castagné Velasco, quien murió junto a otro elemento.
Tras el atentado a los oficiales, la federación lo localizó e intentó su captura en Chipilo, Puebla, en donde tenía su residencia, pero al oponerse murió abatido.
El H, el jet set veracruzano
Hernán Martínez Zavaleta, alias el Comandante H, era un conocido empresario de la ciudad de Coatzacoalcos, en el sur del estado de Veracruz, que tenía trato no sólo con el llamado jet set de esa ciudad, también con políticos y periodistas.
El gobierno federal lo vincula como líder de Los Zetas en los estados de Veracruz, Tabasco y Campeche. Es catalogado como un hombre peligroso y violento.
Según el mismo Gobernador, Miguel Ángel Yunes Linares, el ahora detenido llegó a operar a la región desde el 2006, y durante estos 11 años no solo actuó con impunidad sino logró hacer relacione y negocios con empresarios bien establecidos en esa zona de la entidad veracruzana, en donde tenía su centro de operaciones.
Dos de sus presuntos prestanombres, según columnas periodísticas de la ciudad de Coatzacoalcos, son dos hermanos, uno de ellos regidor del municipio, emanado del Partido Verde Ecologista de México.
El gobierno estatal ha clausurado varios negocios que se presume son del H, entre ellos un restaurante y un gimnasio. Hay constancia fotográfica que en la inauguración de esos negocios acudieron deportistas, empresarios, periodistas y políticos que posaron para las gráficas junto a Hernán Martínez.
Un grupo antagonista le disputaba la plaza al Comandante H, y fueron ellos los que se presume dieron muerte a “el berna”, lugarteniente del capo, muerto a balazos en los últimos días de junio.
Incluso, durante el funeral de Bernardo Cruz Mota, el 25 de junio, la Marina-Armada de México y la Policía Ministerial interceptaron el cortejo para llevarse el cuerpo del finado junto con su madre, todo para corroborar que se trataba de la misma persona que era buscada por las autoridades.
Se presume que ese crimen fue el que motivó a Martínez Zavaleta ordenar la muerte de un taxista y su familia, pues presumía que el trabajador del volante había participado en la muerte del sicario.
La orden la ejecutó Alaín López Sánchez, alías la Libre, detenido este 5 de junio. El delincuente mató al taxista, a su esposa y a sus cuatro hijos, todos menores de seis años de edad.