Redacción El Piñero | Miguel Ángel López
Loma Bonita, Oaxaca. – ” ¡Señor boleamos su calzado! ¡Señor lustramos sus zapatos! ¡Señor queremos que nos de trabajo por favor!
” Héctor Crespo Aguilar, de 11 años de edad recorre las calles de Loma Bonita, Oaxaca con su equipo de trabajo: un cajón de madera blanca sin pintar, un banquito pequeño para sentarse, y con ellos comenzar la brega de la boleada, el trabajo diario.
Todos los días él pequeño trabajador busca el sustento para complementar el gasto de su casa, para apoyarse con sus útiles escolares pues estudia quinto año de primaria en la escuela “Jaime Torres Bodet”.
En ocasiones le hemos visto platicar con una hermana menor, a quien él da unos pesos qué ya se ganó para mandarlos a su casa.
Él vive en la colonia ” El Caracol,” de la ciudad lomabonitense. Continuamente platicamos y siempre se dirige así: ¡Hola jefe! ¿cómo está? Un gusto verlo.
Platicamos y lo vemos partir buscando con su frágil voz y su delgada figura, un cliente. Siempre le deseamos lo mejor porque es un niño esforzado y dedicado; un menor de edad qué conoce el sufrimiento y la pobreza como muchos niños que andan por ahí… muchos Héctor qué buscan un lugar, un espacio en la sociedad.
Si lo ves por ahí dale trabajo. Él lo necesita. Si lo ves salúdalo con una sonrisa y plática con él. Si lo ves deséale lo mejor y tenle confianza pues sabe hacer muy bien su trabajo.
¡Él es Héctor, qué no se te olvidé su nombre!
La nota que Miguel Ángel López hizo a Héctor Crespo fue en el año 2020, de eso han pasado casi tres años, y por eso preguntamos hoy: ¿Héctor por dónde andas hoy?