El alcalde indolente
Malecón del Paseo
Luis Velázquez
VERACRUZ.- EMBARCADERO: Un político, con el sello fidelista en las neuronas y el corazón, director que fuera de la facultad de Derecho de la Universidad Cristóbal Colón, abogado que nunca, se afirma en el carril jurídico, ha litigado, síndico único del alcalde Ramón Poo Gil, continúa sonando “los tambores de guerra” en contra del deporte en Veracruz… Y lo retumba desde hace unos dos, tres meses, y cuando faltan unos días para que el Ayuntamiento jarocho se vaya, digamos, “sin pena ni gloria” para el bienestar social de la población… Se llama Carlos Díaz Corrales, y todo indica, por sus pistolas, actúa encima del presidente municipal, y quien, oh paradoja, quizá calla, y por añadidura, solapa y se vuelve cómplice… La historia es la siguiente: la secretaría Desarrollo Agropecuario, Territorial y Urbano, SEDATU, lanzó con recursos federales un programa de unidades deportivas en el país, y la unidad “Fernando Pazos Sosa fue considerada con una inversión de quince millones de pesos… Entonces, la remodelaron por completo… Entre otras cositas, con una cancha de fútbol de primera, con pasto de primera, y espacio súper… El dinerito fue aplicado con toda la honestidad del mundo, incluso, y sin pasar por las manos edilicias en un tiempo cuando la corrupción política mantiene desprestigiado por completo al país y a Veracruz, luego del duartazgo… Entonces, y quizá mera coincidencia, empezó el torpedeo en contra de la unidad deportiva y que al momento sigue con la pasión desaforada en su más alto decibel…
ROMPEOLAS: El regidor Hugo Vázquez Bretón, esposo de la ex alcaldesa y ex diputada local y federal (que tiró la curul para arañar el puesto siguiente), levantó un muro Donald Trump, reclamando que el patronato de la Unidad Deportiva “Fernando Pazos Sosa” entregara, a fuerza, becas a los deportistas, cuando, caray, se trata de una asociación civil que sólo busca fomentar el deporte, sin lucrar absolutamente para nada… Y más cuando al frente está el ingeniero Baltazar Pazos de la Torre, cuya honestidad es “a prueba de bomba”… Después, el bombardeo inició (hasta el día de hoy) con el síndico Díaz Corrales, quien basado en sofismas está obsesionado con que la LXIV Legislatura revise la aplicación de los fondos federales, cuando, caray, y en todo caso, corresponde, primero a la SEDATU y después a la Auditoría Superior de la Federación… Desde entonces, con la unidad lista para abrirse pues fue cerrada por la remodelación, el Patronato ha vivido en el infierno, sin que el alcalde Ramón Poo aseste un manotazo… Su premisa se derivaría del viejo principio francés de “dejar hacer y dejar pasar”, ignorándose el objetivo y que, bueno, cualquier deportista pudiera, digamos, intuir, olfatear, rastrear… Tal cual, el síndico se niega a firmar el convenio del Ayuntamiento con la asociación civil y la unidad sigue cerrada… Y nada lo hace reflexionar… Diríase, incluso, que el presidente municipal se hace tonto… Fue el mismo caso, por ejemplo, en la transición del Sistema de Agua y Saneamiento, SAS, al MAS de Odebrecht… Pero si primero fue el regidor y después, el síndico, entonces, significa que “una mano superior está meciendo la cuna”… Y Baltazar Pazos, ni con la XEU de por medio, ha removido la posibilidad
ASTILLEROS: El síndico Carlos Díaz Corrales y Baltazar Pazos son antiguos conocidos… Se enfrentaron hará unos quince a veinte años cuando el problema de “Los escolapios” en la Universidad Cristóbal Colón, en que el primero fue uno de los profesores “grillos”, y el segundo era el presidente del Patronato de la UCC… Y como el síndico, con su legión magisterial, perdió la batalla, ahora, quiere cobrar la fractura, arrasando de por medio con miles de deportistas… Más aún: el síndico es un fidelista a morir… En aquel tiempo, por ejemplo, le impartió clases particulares de Derecho a Fidel Herrera Beltrán, quien estudiaba un doctorado en la Universidad Veracruzana… Su biógrafo dice que “el fogoso” quedó tan agradecido que le obsequió una notaría pública en Orizaba por el mérito académico y profesional conocido como “dedazo”, dedazo que en aquel entonces, “en la plenitud del pinche poder”, se tradujo en más de cien notarías a los amigos y benefactores y operadores… Tal cual, entonces, el síndico de Ramón Poo usufructúa el sello de Fidel Herrera, procurado en la plaza jarocha por Carolina Gudiño, la mismita que desde el PVEM busca resucitar como candidata al Senado de la República por encima, digamos, de Anilú Ingram Vallines, delegada federal de la secretaría de Desarrollo Social, y de Elizabeth Morales, delegada federal del ISSSTE, ex diputada federal y ex alcaldesa de Xalapa… Falta precisar, sin embargo, si el síndico suena “los tambores de guerra” en base a su rencor y odio, y/o por órdenes del fogoso y/o de la Gudiño y/o del alcalde… Y/o los cuatro ejes rectores juntos… Y él se habría trepado a la vorágine…
ARRECIFES: Y más, por lo siguiente: Baltazar Pazos es mirado por las elites priistas como un amigo del gobernador Miguel Ángel Yunes Linares… También como un amigo de Andrés Manuel López Obrador, el puntero en las encuestas presidenciables… Una amistad, que por cierto, naciera entre AMLO y Fernando Pazos de la Torre, QEDP, el hermano mayor de Baltazar, y que tanto espacio diera a “El peje” en Villahermosa, donde heredó a la familia una estación televisora y otra radiofónica… Y más, cuando otro hermano, Luis, es panista, trabajó con Vicente Fox y Felipe Calderón en los doce años del PAN en Los Pinos, y escribe libros cuestionando la política priista… De ser así, el síndico Carlos Díaz Corrales se creerá el “Niño Pípila” del Golfo de México, cumpliendo misión superior… En medio de la pasión truculenta y revolcado los más afectados son los deportistas… Y sea como sea, evidencia por completo el principio de autoridad, la ética y la moral, y la responsabilidad social de Ramón Poo… Ni modo, a veinte días de terminar el año y el cuatrienio, al patronato de la unidad deportiva, Fernando Pazos Sosa, sólo resta esperar que Poo Gil y compañía se vayan y entreguen la silla embrujada del palacio municipal a Fernando Yunes Márquez para ver si el huracán en contra del deporte en Veracruz se disuelve… Otro daño social más heredado por Javier Duarte, quien impuso a Ramón Poo y palomeó a los ediles priistas…