Por: Roberto POLO | Misión Especial de El Piñero
Jacatepec, Oaxaca.- En San Martín, comunidad que pertenece al municipio de Santa María Jacatepec, ubicado en la región de la Cuenca del Papaloapan, hay pobladores que se mantienen invisibles ante los ojos de las autoridades pese haber sido víctimas de un desastre natural, ocurrido el pasado 17 de mayo.
Una semana después de la tormenta que colapsó carreteras, tiró árboles y varios techos de viviendas humildes, ninguna autoridad se ha hecho presente para auxiliar a las familias damnificadas, muchas de ellas quedando desamparadas y amén de la suerte.
Fue en San Martín, una población que no rebasa los 400 habitantes cuya mayoría se dedica a las labores del campo, donde al menos unas diez viviendas resultaron afectadas con las pérdidas de sus techos, principalmente.
Para María Magdalena Jacobo, esta tormenta liquidó su negocio de comida, pues su cocina se quedó devastada, sin puerta y techo. Ella, discapacitada desde niña, se dedica a la venta de tamales y guisados propios de la región que vende a pie de la carretera que une a Tuxtepec con Oaxaca Capital.
Desafortunadamente, los estragos le pegaron de manera directa a su economía, pues sin cocina y un lugar adecuado para guisar, no ha podido trabajar.
Refiere que hasta el momento ni el presidente municipal ni otra instancia han acudido a conocer los daños que provocó la tormenta y que hoy la tiene sujeta a la suerte, tratando de conseguir manos solidarias que la ayuden a colocar nuevamente su techo.
Actualmente, María vive con su mamá, mayor de edad, y su hija de nueve años, con quienes se apoya para salir adelante pese a las adversas circunstancias.
SOLO LLEGARON A TOMAR FOTOS; EL PRESIDENTE SE ESCONDIÓ
El caso de Victoria Juárez no es diferente al de María, el día que cayó la tormenta ella se encontraba al interior de su casa cuando, de manera repentina, los fuertes vientos le arrancaron su techo de lámina.
Victoria es viuda, es el soporte de su hogar y quien trabaja en el campo donde gana cien pesos diarios para amortiguar la vida. Hoy que se quedó sin techo ni lugar para vivir, pide el auxilio de la población para poder comprar láminas que cubran su hogar.
Frente a esta situación acusó al presidente municipal Víctor Raúl Hernández de no atender a su pueblo, máxime cuando un desastre natural causó estragos que los dejó sin hogar y a la deriva.
Recuerda que horas después de la tormenta, al lugar arribaron policías quienes solo se limitaron a tomar fotos de los daños, se fueron y ya no regresaron.
Por su parte, vecinos de la zona condenaron la indolencia del gobierno municipal cuyo presidente hizo oídos sordos al desastre al no llegar ni siquiera a conocer el saldo negativo de la ofensiva natural que tiene a las familias de San Martín pidiendo ayuda para poder salir adelante.