Carlos Álvarez
Javier Duarte de Ochoa ofreció a la Fiscalía General de la República (FGR) entregarle pruebas sobre el dinero que presuntamente desvió desde el Gobierno de Veracruz -cuya titularidad tuvo del 1 de diciembre del 2010 al 12 de octubre del 2016- a la campaña presidencial de Enrique Peña Nieto en 2012.
Así lo informó este lunes 19 de agosto el diario Reforma, basado en fuentes del Gobierno Feferal cercanas al caso judicial, mismas que abundaron que en julio pasado el ex gobernador veracruzano envió una solicitud de criterio de oportunidad a la FGR, en la que, a cambio, pide que la información y evidencias que proporcione no sean utilizadas contra sus ex colaboradores.
El ex mandatario estatal veracruzano ofreció declarar contra el ex presidente Peña Nieto y varios de sus colaboradores, a quienes asegura que también entregó dinero para fines electorales.
Sin embargo, el rotativo indicó que la solicitud de Duarte de Ochoa para iniciar una negociación de beneficios no ha sido respondida aún por la FGR.
Las mismas fuentes del Reforma allegadas al caso -que pidieron no ser citadas- afirmaron que la institución a cargo de Alejandro Gertz Manero está a la espera de que Duarte de Ochoa dé el primer paso y presente las evidencias con las que dice contar, para valorarlas, al igual que su petición.
El rotativo recordó que en el 2012, el Partido de la Revolución Democrática (PRD) acusó un presunto financiamiento de Duarte de Ochoa a la campaña de Peña Nieto, después de que el 27 de enero de ese mismo año la entonces PGR aseguró en el Aeropuerto Internacional de Toluca un total de 25 millones de pesos en efectivo, a dos colaboradores del entonces gobernador de Veracruz.
Luego, el pasado 9 de julio, el ex gobernador reveló que Peña Nieto le “regaló” una suma de dinero para ayudarlo durante su estancia en prisión, lo que el veracruzano atribuyó a “cargos de conciencia” del ex mandatario nacional.
Duarte de Ochoa aseguró que el dinero fue entregado por un amigo en común del ex presidente a su hermano Cecil Duarte de Ochoa, en una casa de la Ciudad de México.
Según el dicho del ex gobernador, esos mismos recursos los empleó después, para pagar unq supuesta “extorsión” al entonces encargado de despacho de la PGR, Alberto Elías Beltrán, y a Felipe de Jesús Muñoz Vázquez, ex titular de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delitos Federales (SEIDF), quienes rechazaron categóricamente la acusación.
El pasado 15 de julio, Duarte de Ochoa -quien se encuentra recluido en el Reclusorio Preventivo Varonil Norte de la Ciudad de México, desde el 17 de julio del 2017-, dijo en un video grabado desde la terraza de una habitación de un hotel de Guatemala, que su supuesta detención en realidad fue una entrega pactada con el Gobierno de Peña Nieto.
“Hoy es sábado 15 de abril de 2017 […] Me estoy entregando y evidentemente darán a conocer como si hubiera sido sorprendido y detenido, pero como verán, estoy totalmente en libertad”, dijo Duarte de Ochoa en el video de 33 segundos de duración, grabado el día antes citado y difundido este lunes, a través de la cuenta en la red social Twitter, del periodista Ciro Gómez Leyva.
Elementos de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) y de la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol) supuestamente arrestaron a Duarte de Ochoa, alrededor de las 21:00 horas del 15 de abril de 2017, en lo que calificaron como “un hotel de lujo”, ubicado en el municipio de Panajachel, departamento de Solalá, a orillas del Lago Atitlán.
En la grabación difundida por el periodista, el ex gobernador veracruzano aparece con la misma camisa con la que fue captado por los periodistas el día de su “detención”, acusado de asociación delictuosa en detrimento del erario veracruzano, delito por el que purga una condena de nueve años de cárcel.
Según con informes transmitidos a diversos periodistas la noche de la detención, la entonces Procuraduría General de la República (PGR) llegó al exmandatario estatal a través de un intenso trabajo de Inteligencia. En ese entonces Duarte de Ochoa sumaba más de 180 días prófugo de la justicia luego de evadirse de una orden de aprehensión girada en su contra a inicios de ese año.
Fuentes de la PGR filtraron a medios que la supuesta pista que los había llevado hasta Guatemala, había sido que los hijos del ex gobernador de Veracruz volaron de México a Guatemala, un día antes del supuesto operativo, en compañía de su abuela y una de sus tías.
Duarte de Ochoa fue trasladado el lunes 17 de julio del 2017 -en medio de un fuerte dispositivo de seguridad y resguardado por la Dirección General del Sistema Penitenciario del Ministerio de Gobernación de Guatemala-, desde el centro carcelario en Matamoros a un hangar de la Fuerza Aérea guatemalteca, para su extradición a México.
Días antes, el exgobernador de Veracruz afirmó en entrevista con Radio Fórmula que su detención fue un hecho totalmente pactado con las autoridades mexicanas, quienes, señaló, le pidieron entregarse antes de las elecciones en el Estado de México —llevadas a cabo en junio de 2017 y en las que ganó Alfredo del Mazo Maza—, bajo la promesa de que dejarían en paz a su familia.
“El acuerdo era muy sencillo: ‘Te tienes que entregar antes de las elecciones, que eran en junio de 2017, si te entregas antes de abril vamos a dejar a tu familia en paz, un lugar donde puedan establecerse, y tú, el acuerdo es que vas a ser detenido y vamos a ver las mejores condiciones en que puedas estar’”, narró Duarte de Ochoa.
De acuerdo con el ex gobernador de Veracruz, el pacto se llevó a cabo en la Ciudad de México entre su exabogado Marco Antonio del Toro Carazo y funcionarios de la Secretaría de Gobernación (Segob) y de la Procuraduría General de la República (PGR), entonces a cargo de Miguel Ángel Osorio Chong y Raúl Cervantes Andrade, respectivamente.
Duarte de Ochoa, de 46 años de edad, aseguró en la entrevista radiofónica que no tuvo otra opción más que acceder a dicha solicitud para proteger a su esposa Karime Macías de Tubilla y a sus dos hijos. “No tenía para dónde hacerme, era sí o sí”, declaró el ex gobernador.
Ese misma día, el diario Reforma publicó una entrevista en la que Duarte de Ochoa dijo que pagó una “extorsión” a Alberto Elías Beltrán, entonces encargado de despacho de la PGR, para que dejaran en paz a su familia y le reclasificaran el delito de delincuencia organizada, lo que implicaría conseguir una sentencia más baja.
“O pagaba o iban contra mi familia, al más puro estilo de Los Zetas. El dinero para pagar la extorsión me la dio el presidente Peña Nieto, me lo mandó con un amigo que tenemos en común […] hay un cargo de conciencia del presidente por lo que yo estoy pasando”, le dijo Duarte de Ochoa a la revista Proceso.
“Soy un chivo expiatorio […] no hice lo que dicen que hice, robarme el dinero, mi detención sirvió para ganar la elección del Estado de México. En un país con la coyuntura del escándalo de la Casa Blanca, las constructoras y Ayotzinapa”, aseveró el ex gobernador.
“Te lo explico con palitos y bolitas, saqué dinero de una bolsa para meterlo en otra. En Veracruz siempre existió un déficit anual de 13 mil millones de pesos irreductibles […] y en los fondos revolventes, fondos federales y locales, se utilizó la llamada ‘licuadora’, pero ese dinero se invirtió en Veracruz”, dijo Duarte de Ochoa a la publicación.
Sin embargo, el coordinador del grupo legislativo del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en el Senado de la República, Miguel Ángel Osorio Chong, negó haber pactado con Duarte de Ochoa su entrega a las autoridades federales mientras el primero fungió como titular de la Segob) durante el gobierno de Peña Nieto.
Osorio Chong advirtió que “no hubo ningún acuerdo” o pacto con el ex mandatario veracruzano, y que a la Segob y al Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen) les “urgía detener a este delincuente, a este presunto delincuente”, por lo que se redoblaron los esfuerzos para dar con el paradero de Duarte de Ochoa.
“Yo exijo que presente pruebas que dice tener en los señalamientos que a mi persona respecta. No tengo nada que ver ni con él, ni con su gente, ni con sus abogados. No los conozco y la última ocasión que vi a Duarte fue en la Segob, él siendo gobernador de Veracruz”, indicó Osorio Chong.
El ex funcionario federal aseguró que habló por última ocasión con Duarte de Ochoa en la sede de la Segob, bajo el contexto del proceso de renuncia a la gubernatura estatal por las acusaciones en su contra. “Le sugerí que se enfrentara directamente ante la otrora PGR y él tomó la decisión dos días después”, abundó el ahora senador.