Jaime GUERRERO
Oaxaca.- Ahí estaba la cúpula estatal del PRI, sus cuadros, ex funcionarios, funcionarios del gabinete legal y ampliado (en día no laborable), virtuales candidatos y candidatas, a diputados locales, federales, ediles, comandados por Alejandro Murat Hinojosa, que como Gobernador en turno, es el responsable directo de los resultados electorales en Oaxaca, del 1 de julio a favor del Revolucionario Institucional y su candidato presidencial.
Un día antes (el pasado sábado), Murat Hinojosa, designó a Alejandro Avilés Álvarez con el aval de José Antonio Mead Kuribreña, como coordinador de campaña en Oaxaca, del virtual candidato presidencial.
Con todo listo, éste domingo, arribó el ex Secretario de Hacienda, a la capital de Oaxaca, en un fin de semana largo vacacional, para pretender madrugar las protestas de la Sección 22 del SNTE y organizaciones sociales, pro morenistas. Empero, si hubo protestas, entre jaloneos y empellones, sin mayores incidentes.
Desde temprana hora, el delfín presidencial de Enrique Peña Nieto, arribó al aeropuerto internacional de la capital de Oaxaca, le acompañó su esposa, Juana Cuevas. Fue recibido por Murat Hinojosa, y su esposa Ivett Moran.
Es su primer visita como virtual candidato del PRI a la presidencia de México a Oaxaca, antes de ser arropado por la militancia priista, hizo una parada: desayunó en compañía de Murat Hinojosa, su esposa Ivet Moran; el edil capitalino José Antonio Hernández Fraguas, el secretario de desarrollo social, Raúl Bolaños Cacho Cué, virtual candidato al Senado de la República, en primera fórmula por el PRI-PVEM, en esa regla mediática de tiempos electorales, para darse “el baño de pueblo”. La gran ausente fue la diputada federal, Mariana Benítez Tiburcio.
La cargada priísta, fotógrafos y reporteros, lo vieron comer pan de yema, tasajo y chocolate antes de salir en calenda hacia el Centro Cultural y de Convenciones de Oaxaca (CCCO).
Tras los alimentos, las fotos, los apretones de mano y breves charlas con amas de casa y mercaderes, avanzaron sobre Calzada de la República, con el Sol a plomo. Mead, Murat, Moran, Cuevas, el líder del PRI, Avilés, iban escoltado por un centenar de personas, calenda: marmotas, monos, chinas oaxaqueñas, banda de música, y elementos carnavalescos: arlequines y bailarinas.
Un escenario de fiesta montado que intentó animar a Meade.
“Oaxaca tiene un sabor único”, soltaba entre el tumulto de priístas, de quienes buscan una selfies con el elegido del PRI, de quienes se peleaban por acaparar reflectores en la prensa siguiendo el viejo adagio “el que se mueve no sale en la foto” instituido por quien fue uno de los prinosaurios más longevos del otrora partidazo, Fidel Velázquez.
Meade saluda, esboza sonrisas, abrazaba y tornaba su rostro de preocupación e incertidumbre que se incrementó a medida que avanzó hacia el complejo de Convenciones, ubicado frente al edificio de cristal de la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE).
La manta y los empellones
Desde lo alto de aquél edificio, quedó desplegada una manta: “Fuera Meade, Oaxaca te repudia”. De frente a la calenda un pequeño grupo de personas se lanza con pancartas y gritos de ¡Asesino!
A la entrada, el edil con licencia de Cosolapa, que por la reelección, Gustavo Díaz, funcionarios y policías vestidos de civil, forcejearon con integrantes del magisterio, organizaciones sociales, y activistas y hasta empleados de diputados de Morena, para impedir que entorpecieran en acto de Mead Kuribreña.
Gustavo Díaz, en su afán de opacar la protesta, arengaba “Mead” y de paso pretendía impedir la labor de dos reporteros; a unos pasos, el comisionado de la Policía Estatal de Oaxaca, José Sánchez Saldierna; vestido de civil y con sombrero, coordinando las acciones para contener la protesta contra el precandidato del PRI y la comitiva comandada por Murat Hinojosa.
La trifulca se prolongó hasta el ingreso del aspirante priista acompañado del gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat Hinojosa. Posteriormente arribaron taxistas adheridos al Sindicato “Libertad”, organización de transportistas asociada al PRI, quienes colocaron sus vehículos frente al Centro de Convenciones, también como medida contra los maestros de la Sección 22 del SNTE.
Y es que minutos antes, Genaro Martínez Morales, secretario de Organización de la Sección 22 del SNTE, aseguró que el candidato del PRI representa a la clase política que ha intentado imponer la reforma educativa y responsable de la situación actual del país y de la miseria en que tienen a las comunidades y pueblos.
De paso, anunció que en su quinto Congreso Político definirán cuáles serán las acciones que tomarán en el marco de la coyuntura electoral, con su plan estratégico de acción.
Ya adentró, la cargada priísta, escuchaba a su virtual candidato presidencial, quien advirtió que lo que está en juego en la elección del 1 de julio, es la dignificación de las instituciones y el servicio público. De paso, que Oaxaca, requiere de dialogo y unidad.
Y aun cuando destacó que caminó por Oaxaca, en momento de conflicto y de dificultad, por su hablar pausado y suave, no prendió lo suficiente a la militancia. No obstante, ensalzó al Gobierno Murat Hinojosa, y lo calificó como un Gobierno que sale a las calles, que da la cara y la mano a los oaxaqueños que enfrenta sus retos con gallardía y que “Oaxaca necesita diálogo, para resolver sus problemas.
Por lo pronto, pidió el apoyo de la militancia y los delegados del PRI de Oaxaca, para ser oficializado como el candidato presidencial, lo mismo de los futuros candidato al Senado, diputado federales, locales y concejales.
Murat Hinojosa, dijo que la militancia del PRI está lista para enfrentar los retos del proceso electoral.
Y advirtió que en la actual elección presidencial, significa que se tiene que elegir entre los líderes que tienen temple y no se derriten cuando les acercan el fuego, como “Pepe Mead”, u otros que solo salen a las calles y tienen inexperiencia.
Acto seguido, lanzó arengas: “vamos a ganar, vamos a ganar”, favor de Mead Kuribreña y cerró su discurso, que tuvo más intensidad que el virtual candidato presidencial.
Por lo pronto, la cúpula estatal del PRI y sus cuadros, comandados por Alejandro Murat Hinojosa, cumplieron y si dijeron listos para la batalla electoral del 1 de julio a favor del Revolucionario Institucional y su candidato presidencial, que aún no prende, faltando 5 meses para la elección presidencial.