Redacción El Piñero
Uno de los condimentos favoritos de los mexicanos para acompañar papas a la francesa, hamburguesas e incluso huevo revuelto, es la salsa cátsup. Recientemente, una versión imitación de este popular aderezo, que cuesta solo 18 pesos, ha sido destacada por la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) en su más reciente evaluación, por su calidad y por no contener conservadores.
Profeco sometió a análisis 23 productos de cátsup, 4 de ellos imitación, evaluando aspectos como calidad sanitaria, contenido neto y de tomate, así como la presencia de colorantes, conservadores, espesantes, azúcares, sodio y calorías. Además, revisaron que la información en el etiquetado cumpla con la normatividad vigente en México, según se informó en la Revista del Consumidor de abril de 2024.
Imitación de cátsup Del Monte, aprobada y accesible
Entre los productos evaluados, la imitación de salsa cátsup de la marca Del Monte, en su presentación de 370 gramos, pasó todas las pruebas de calidad. No solo resultó ser la más económica, con un costo de 18 pesos, sino que también se destacó por no contener saborizantes, colorantes ni conservadores. El espesante utilizado en su fórmula es carboximetilcelulosa, y su endulzante principal es el jarabe de maíz de alta fructosa.
En cuanto a su contenido nutricional, por cada 100 gramos contiene:
Azúcares totales: 21.2 gramos
Sodio: 890 miligramos
Carbohidratos: 22.9 gramos
Contenido energético: 95 kilocalorías
Profeco aclaró que las imitaciones de cátsup, como en este caso, suelen tener menor contenido de tomate que las versiones originales, lo que puede impactar en su sabor y consistencia.
Recomendaciones de Profeco sobre el consumo de cátsup
Profeco también recordó a los consumidores que una cucharada sopera de cátsup contiene aproximadamente 17 gramos, lo que puede significar una ingesta considerable de sal, azúcares y almidones, dependiendo de la cantidad utilizada. Además, debido a su acidez, el consumo excesivo podría afectar a personas con problemas estomacales, como gastritis o úlceras.
Finalmente, la Profeco exhortó a los consumidores a revisar detalladamente las etiquetas para identificar si se trata de un producto original o de una imitación.