Luis Manuel García / Sin Embargo
Celaya, Gto./Ciudad de México, 29 de agosto (ZonaFranca/SinEmbargo).- La detención del presunto asesino de la niña de seis años Joana Lizbeth Colín Olalde, desaparecida el pasado viernes por la noche y localizada muerta este domingo, fue anunciada por la Procuraduría de Justicia de Guanajuato.
El presunto culpable fue identificado como Ángel de Jesús N. y aunque el breve comunicado oficial no lo precisa, e incluso señala una edad de 27 años, fuentes cercanas a la investigación dieron a conocer que se trata de un habitante de la misma colonia de la víctima, de 25 años de edad, conocido como “El Babalú”.
Se sabe que el detenido conocía a la menor de edad y a otros pequeños de la zona.
El cuerpo de Joana Lizbethe fue velado la noche de ayer en su casa y hoy se espera que a las 13:30 horas se realice una misa de cuerpo presente en el templo de la colonia Emiliano Zapata, para después darle sepultura en el Panteón Sur.
En tanto, el detenido quedará a disposición del Juez para enfrentar los cargos imputados en su contra.
La pequeña Joana es recordada por familiares y amigos como una niña alegre y juguetona que no se merecía lo que ocurrió.
Vecinos y familiares exigieron a las autoridades que detengan a los responsables de su homicidio y que paguen por lo que hicieron, en un caso del que ahora se reporta un sólo detenido.
Este lunes, la Subprocuraduría de Justicia indicó que la niña murió por traumatismo craneoencefálico, que habría recibido 48 horas antes. En lugar se localizaron restos de helado que la niña había comprado, así como unas prendas de vestir de gente adulta.
La trágica historia comenzó, cuando el viernes pasado la pequeña fue a la tienda a las 21:30 horas y ya no regresó a su casa.
Los familiares de Joana bloquearon la autopista Celaya- Querétaro, en el tramo de la entrada a la colonia Juan Pablo II, porque aseguraron que no habían tenido apoyo de las autoridades ministeriales para buscar a la niña.
Las autoridades ministeriales realizaron un operativo en el que detuvieron a un sospechoso en las inmediaciones de la zona donde Joana Lizbeth fue reportada como desaparecida.
Ya por la noche de este mismo día, entre las 20:00 y 20:30 horas se recibió un reporte al número 911 de emergencias que alertó a la Policía Municipal del hallazgo de un cadáver en la calle Tulipán de la colonia Jardines, Primera Sección, cerca de las vías del tren.
La Procuraduría de los Derechos Humanos del Estado de Guanajuato abrió el expediente 75/2017/C2 mediante el cual se decretó una medida precautoria tras el homicidio de la niña, Joana Lizbeth Colín Olalde.
También se informó que los padres de la niña serían inscritos en el Registro de Víctimas, lo que les permitiría recibir medidas de atención y ayuda inmediata como, asesoría legal, atención psicológica y apoyo de gastos funerarios.
LUTO Y CLAMOR DE JUSTICIA
La trágica historia comenzó, cuando el viernes pasado la pequeña fue a la tienda a las 21:30 horas y ya no regresó a su casa.
Los familiares de Joana bloquearon la autopista Celaya- Querétaro, en el tramo de la entrada a la colonia Juan Pablo II, porque aseguraron que no habían tenido apoyo de las autoridades ministeriales para buscar a la niña.
Las autoridades ministeriales realizaron un operativo en el que detuvieron a un sospechoso en las inmediaciones de la zona donde Joana Lizbeth fue reportada como desaparecida.
Ya por la noche de este mismo día, entre las 20:00 y 20:30 horas se recibió un reporte al número 911 de emergencias que alertó a la Policía Municipal del hallazgo de un cadáver en la calle Tulipán de la colonia Jardines, Primera Sección, cerca de las vías del tren.
La Procuraduría de los Derechos Humanos del Estado de Guanajuato abrió el expediente 75/2017/C2 mediante el cual se decretó una medida precautoria tras el homicidio de la niña, Joana Lizbeth Colín Olalde.
También se informó que los padres de la niña serían inscritos en el Registro de Víctimas, lo que les permitiría recibir medidas de atención y ayuda inmediata como, asesoría legal, atención psicológica y apoyo de gastos funerarios.
Se sabe que el detenido conocía a la menor de edad y a otros pequeños de la zona.
En una casa humilde, con tres cuartos de concreto, ubicada en la calle San Juan 119 es donde vivía la pequeña Joana con su mamá Karina Colín, su padre Salvador Hernández, su hermano de 13 años y su abuelita.
En la cama donde dormía, yace una jirafa de peluche, con la que dormía y la cuál ya no abrazará más .
Elisa Olalde González, abuela de de la pequeña, recordó que el vienes le dio de comer salchichas con jitomate antes de que saliera a la calle y después ella se retiró a su cuarto. Mientras que la niña se quedó con su mamá. Después familiares impidieron que siguiera hablando con los medios de comunicación.
Aunque fuera de cámaras recuerda a su nieta como una niña alegre que le gustaba bailar y cantar. Narró que ella estaba muy contenta pues ya regresaría a la escuela. Cursaría primero de primaria. Además de que el próximo 10 de octubre cumpliría 7 años.
Uno de sus tíos comentó que Joana era una niña muy querida por los vecinos, pues era muy sociales y quienes a su vez están muy enojados por lo sucedido.
Por su parte la señora Ana Laura Martínez, accedió a hablar un minuto con este medio y entre lágrimas la recordó como una niña tranquila.
La vecina mencionó que convivía mucho con su nieta, y ella la cuidaba, e incluso le daba de comer cuando su madre tenía que salir a trabajar.
Recordó que la noche que desapareció a donde fueron a buscarla fue a su casa, pero ese día no había ido en todo el día.
Ana Laura recalcó que ahora su lucha será para que detengan a el o los responsables y es que ningún niño o niña merece que les hagan algo, así como se lo hicieron a Joana Lizbeth.
Cabe señalar que en el predio donde se localizaron los restos de un helado que la niña compró en una tienda antes de ser raptada, además de ropa de adulto donde vive el hombre detenido el sábado, sigue acordonado y custodiado por una patrulla de la Policía Municipal.
ACTO DE UNA MENTE TRASTORNADA
El Presidente Municipal de Celaya, Ramon Lemus Muñoz Ledo, dijo que el asesinato de la niña Joana Lizbeth Colín Olalde de seis años de edad es un hecho despreciable, cometido por una mente trastornada.
En entrevista, señaló que desde un principio la Secretaría de Seguridad ciudadana intervino en apoyo a la familia en la búsqueda de la menor de edad en coordinación con la PGJE, y seguirán colaborando con ellos para esclarecer este hecho y se castigue los culpables con todo el peso de la ley.
“Este yo lo considero como producto de una mente trastornada y no tiene nombre”, finalizó.