Redacción El Piñero
Loma Bonita, Oaxaca.-Muchos productores rememoran los días en que cualquier día era bueno para hacerse rico con la piña, nuevos ricos empezaban a pulular en nuestras calles, compraban terrenos, construían casas, pero después de 1990, nada fue igual
El precio de la piña era importante, y lo regulaba la COFRINSA, quien se encontraba dentro de la ciudad, así que el precio no era problema, todo el paquete tecnológico era barato y a veces fiado, los inteligentes compraron camiones y acrecentaron su infraestructura, los que no, se la bebieron en las cantinas que eran numerosas en esa época.
Poco a poco, los productores después de Cofrinsa, la ejidal y tantas empacadoras que había aquí, poco a poco tuvieron que acostumbrarse al nuevo estilo, aprender a lidiar con el precio de venta de su producto y con el precio de compra de sus insumos.
Los precios fueron ahora determinados por la oferta y la demanda, variarían en cuestión de días, y se le compraría a quien tuviese el mejor producto, el mejor tratado, el que tenía sus especificaciones para la venta al extranjero, a las empacadoras o al mercado nacional.
Ahora el precio determina todo, hay quienes siguen dándole fe a su piñal, y ve uno los campos a doble surco brillando su verde jaspe en medio del sol, a veces ribeteado por los periódicos envueltos a veces sin ellos, pero ahora cada vez son menos.
Y es que será verdad, que la piña ya no es negocio para muchos, solo para los que se organizan o en su defecto tienen grandes extensiones de siembra; por otro lado, Felipe Reyes dio una estocada importante contra la siembra de la piña al tomarle el pelo a muchos pequeños productores y venderles la idea de que la yuca era ahora el negocio del siglo.
La verdad es que ahora los precios se rigen como dije antes por la cantidad de piña disponible para vender (oferta) o la cantidad de clientes que desean comprarla (demanda) y sus precios aún no se elevan considerablemente a la venta, hoy una tonelada según los expertos ronda entre los 23 pesos kilo y 25 pesos kilo si es cayena, y 28 pesos kilo y 30 pesos kilo si es MD2 (piña miel) el margen de ganancia es poco ya que los insumos como fertilizantes, insecticidas, herbicidas, y demás, son de alto precio; y sin un volumen suficiente la ganancia de un corte cada 6 meses se reduce a nada; ah como se anhelan esos días de campo, esos días de fuerte olor a hierba cortada, a miel licuada y a diésel quemado… esos días de antaño donde podías amarrar un perro con piñas y no se robaban ni el perro ni las piñas, ni los sueños de estar mejor que antes.