* La Secretaría de Hacienda y Crédito Público retiró el estímulo fiscal a las gasolinas Magna y Premium para el periodo comprendido del 24 al 30 de noviembre.
La medida implica que los consumidores pagarán el 100 por ciento del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) de las gasolinas, aunque la Secretaría de Hacienda precisó que los ajustes que aplicarán esta semana no se traducirán en aumentos en los precios de estos combustibles.
Ciudad de México, 23 de noviembre (SinEmbargo).– La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) eliminó el estímulo fiscal a las gasolinas Magna y Premium para el periodo comprendido del 24 al 30 de noviembre.
La medida implica que los consumidores pagarán el 100 por ciento del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) de las gasolinas, aunque la Secretaría de Hacienda precisó que los ajustes a las tasas del IEPS no se traducirán en aumentos en los precios de estos combustibles.
Para el diésel, la dependencia aplicará un estímulo de 27.88 por ciento, el equivalente a 1.405 pesos, de acuerdo con lo publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF).
Esta es una de las últimas medidas que realizara la Secretaría de Hacienda en el sexenio del Presidente Enrique Peña Nieto, pues el 1 de diciembre Andrés Manuel López Obrador tomará posesión como Mandatario.
Desde el 26 de octubre, la dependencia a cargo de José Antonio Antonio González Anaya, dejó de absorber el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios en la gasolina Premium, que equivale a 3.88 pesos por litro. Pero para la Magna es la primera vez en 2018 que se elimina.
La gasolina Magna, la que utiliza el 80 por ciento de los vehículos en México, ha registrado aumentos en lo que va del año hasta superar la barrera de los 19 pesos por litro en algunos estados, lejos de los 10.92 pesos que se comercializaba al inicio del sexenio e Peña Nieto.
Del año 2012 a 2016, año previo a la liberalización de los combustibles, la Magna y la Premium incrementaron un 29.32 por ciento y 30.25 por ciento, respectivamente.
La Reforma Energética, que supuestamente bajaría precios de los energéticos y colocaría a México en un lugar preponderante en el mercado mundial de hidrocarburos, no ha dado los resultados esperados. Al contrario: los precios aumentaron y las energéticas mexicanas están prácticamente en quiebra.
En los últimos seis años, de acuerdo con cifras de la Comisión Reguladora de Energía (México) y la Administración de Información de Energía (EU), en el país la gasolina subió 64 por ciento, mientras que en Estados Unidos bajó un 33 por ciento.
México pasó de ser un importante exportador de petróleo y un pequeño consumidor de combustible a un país que ocupa el lugar número 12 en el mundo en producción de petróleo y el 11 en consumo.