*Alguien gastó 24 mil de los 32 mil pesos que había en la cuenta de Alejandra a través de compras en Zara y Best Buy. De esa manera en un fin de semana se fue lo que Porfirio había ahorrado para su hija en 24 años.
Ciudad de México, (SinEmbargo).- La tarjeta de débito de una joven que murió en el sismo del pasado 19 de septiembre, fue robada tras el derrumbe del edificio donde habitaba, ubicado entre la calle de Torreón y Viaducto, colonia Piedad Narvarte.
De acuerdo con Noticieros Televisa, los padres de Alejandra Vicente Cristóbal, María del Rosario Cristóbal y Porfirio Vicente, acudieron al banco una semana después del sismo, para realizar los trámites necesarios tras el fallecimiento de su hija.
Sin embargo el banco les informó que durante el fin se semana la tarjeta había sido usada cinco veces.
“Fuimos al banco a checar su cuenta y nos informaron que habían sacado dinero”, señaló a Noticieros Televisa Porfirio Vicente padre de la occisa.
Alguien gastó 24 mil de los 32 mil pesos que había en la cuenta de Alejandra a través de compras en Zara y Best Buy. Con esas compras se fue en un fin de semana lo que Porfirio había ahorrado para su hija en 24 años.
“Lo que iba depositando desde que ella nació en una cuenta de 100, 200 pesos, fueron creciendo, fueron creciendo, de ahí agarraba para comprar sus cosas, su escuela, su ropa, era su dinero y cada vez cuando gastaba una cantidad de mil para arriba me buscaba: ¿papá, puedo gastar para esto?, adelante, hija, es tu dinero”, dijo Porfirio.
Además Noticieros Televisa informa que el banco ofreció una investigación en los próximos días, sin embargo no asegura que la familia de Alejandra pueda recuperar su dinero, ni les brindó detalles sobre las sucursales donde se hicieron las compras.
Ante dicho hecho María del Rosario, madre de Alejandra, señala la falta de protocolos de seguridad con el uso de tarjetas bancarias.
“Si las tiendas comerciales, autoservicio, cualquier tienda, cobran con una tarjeta de crédito, pidan identificación y chequen la firma”, señaló María del Rosario.
“Eso ya quedó ahí y la gente que lo haya hecho espero que entienda mi situación y que no le pase nunca nada a su familia, tanto a él. Mi dolor ya lo tengo yo y le deseo lo mejor”, concluyó el señor Porfirio.