Luis Velázquez | Malecón del Paseo
25 de mayo de 2021
EMBARCADERO: Todos ellos fueron grandes líderes del movimiento estudiantil del 68 en México… Todos ellos enfrentaron al presidente Gustavo Díaz Ordaz y al secretario de Gobernación, Luis Echeverría Álvarez, y al jefe policiaco, Fernando Gutiérrez Barrios… Todos ellos significaban un gran destino social y político, luchando siempre del lado de la izquierda… Todos ellos tenían, entonces, entre 20 y 23, 24 años de edad, alumnos, sobre todo, de la UNAM y el Politécnico… Pero muchos años después sus vidas dejaron de cuajar como la mitad del mundo y la otra mitad esperaba, soñaba, deseaba, alentaba, vislumbraba, creía, estaba segura, convencida…
ROMPEOLAS: Entre otros, los siguientes… Tomás Cervantes Cabeza de Vaca, el más radical, empleado en la CONASUPO… Marcelino Perelló, emblemático porque siempre enfermo siempre andaba en silla de ruedas y que un tiempo empujara Rosa Luz Alegría, su novia, dando clases en la Universidad de Sinaloa… Eduardo Valle, El Búho, arrastrando el lápiz en el salón de clases… Salvador Martínez della Roca, fue diputado federal, pero terminó impartiendo clases en la UNAM… Luis González de Alba, acusado de veinte delitos, maestro y escritor… Sócrates Amado Campos Lemus fue acusado de traidor al movimiento y se perdió en el mundo burocrático…
ARRECIFES: Raúl Álvarez Garín, el intelectual del grupo, profesor… Gilberto Guevara Niebla, especializado en educación, inició con López Obrador en la presidencia de la república como asesor educativo… Y Pablo Gómez, el decano de los legisladores federales donde se ha perpetuado en la comodidad de la curul, sirviendo ahora con devoción patriótica a López Obrador… Muchos de ellos militaron en la izquierda y pasaron por aquellos partidos políticos hasta terminar en el PRD… Al lado de ellos, el profesor Heberto Castillo Martínez, quien varios después de la matanza de Tlatelolco, anduviera “a salto de mata” y luego detenido y encarcelado en el famoso palacio negro de Lecumberri…
ESCOLLERAS: En Lecumberri se toparon con otros presos ilustres, entre ellos, los líderes obreros, Demetrio Vallejo y Valentín Campa… También, el escritor José Revueltas, y a quien enviaran a las Islas Marías y en donde escribiera su novela “Los muros del agua”… Fueron las grandes figuras del 68 en un momento crucial del país… Y, sin embargo, su destino fue común al resto de la población… Maestros, funcionarios, burócratas, sin que ninguno, por ejemplo, llegara a una secretaría de Estado en el gobierno federal o a una gubernatura, incluso, caray, a la presidencia de la república…
PLAZOLETA: Inteligencias incandescentes, con el más alto coeficiente, aguerridos y combativos, preparados, maestrías y doctorados, quizá en varios casos porque siguieron luchando contra el sistema, nunca escalaron estadios superiores… Su biografía y formación era para más, mucho más… Pero, bueno, en la vida como en la política, “nunca llega el más capaz (el más inteligente, el más capacitado, el más hábil, etcétera), sino el que más conviene”… Basta y sobra, por ejemplo, con ser esposo, hijo, primo, tío de un hombre o mujer encumbrada en el poder para ascender en la pirámide de la administración pública…
PALMERAS: Ninguno de ellos dejó, por ejemplo, una obra política, literaria, histórica, de relieve… Ni menos como Demetrio Vallejo y Valentín Campa, el par de modestos y sencillos obreros, líderes ferrocarrileros, la gran referencia social de su tiempo, todavía vigente… La mayoría, dignificó la vida estudiantil y política y social en un momento del país, digamos, unos cuantos meses del 68… Pero luego, se perdieron en el anonimato… La vida es así, de pocas luces y muchas sombras…