Agobiada por su intensidad te preguntas: ¿qué lo causa y cuándo parará? Sin embargo, ese dolor de cabeza puede revelar cosas sobre tu salud que ni te imaginas…
Para empezar debes detectar dónde se ubica (en la nuca, hacia el hemisferio izquierdo o derecho, en la frente…), su intensidad y la hora en la que empezó. Esto te permitirá saber si el dolor parte de un desequilibrio físico o emocional, así lo describe la American Academy of Pain Managemente.
Una vez que hayas identificado lo anterior, descubre qué revela tu dolor de cabeza:
Si inicia en la mañana o en las primeras horas del día su origen puede deberse a problemas digestivos: gastritis, colon irritado… o debido a un exceso de analgésicos u otros medicamentos. También está relacionado a una falta de sueño.
Éste está asociado a la vesícula biliar y a una toma de decisión, la cual requirió no solo nuestra atención sino que produjo una tensión y estrés.
Se debe a alergias estacionales o sinusitis. Este tipo de dolor de cabeza se debe a la inflamación en los conductos de los senos paranasales que están detrás de las mejillas, la nariz y los ojos. El dolor es peor cuando uno se inclina hacia adelante
Regularmente es producto de un exceso de cafeína o, bien una falta de ella si el malestar se produce una hora después de la hora en la que se supone debiste tomar tu habitual taza de café.
Es un malestar que dura varios días y regularmente es desencadenado por alimentos como el chocolate, ciertos quesos o el glutamato monosódico.
Aunque no lo creas es muy común, y surge de una pérdida de fluido corporal: deshidratación.
Ojo, si tu dolor de cabeza va acompañado de paño frío, presión arterial alta, sangrado y oscurecimiento de la visión es importante que acudas inmediatamente a un experto de la salud, debido a que éste podría ser manifestación de un problema más serio de salud.
con información de salud180.com