Redacción El Piñero | Corresponsalía
Después de reportarse la desaparición de María de los Ángeles, de 14 años de edad; la menor dio señales de vida a través de redes sociales, donde dijo estar bien y reveló su lamentable situación ya que no se encontraba desaparecida, ella aclaró que decidió irse de su casa pues sufría abuso por parte de un tío.
La adolescente informó de su situación con un mensaje donde explica del abuso sexual que era objeto por parte de su tío. Ella confesó a sus padres y tía su caso pero no le creyeron, y al no tener apoyo decidió irse de su vivienda para buscar un lugar lejos del abuso y violencia de la cual fue víctima en su propio hogar.
Apenas el miércoles pasado su familia “preocupada” informó de la desaparición y solicitó la colaboración para ayudar a la menor a regresar a su casa, donde en realidad sufría una trágica vida.
Esperemos que las autoridades competentes (Fiscalías y DIF Municipal) tomen cartas en el asunto por este caso de violencia, uno de tantos que perviven con la complicidad del seno familiar, aunado a la impunidad y desatención que prevalece desde la instancias gubernamentales preventivas.