Luis Velázquez / Barandal
27 de junio de 2019
ESCALERAS: El gobernador ha dado un manotazo. Pocos lo han advertido. Pero las órdenes están dadas y ni siquiera, vaya, el camello pasaría por el ojito de la aguja.
Por ejemplo:
El diputado presidente de la Comisión de Vigilancia de la LXV Legislatura, morenista, anunció el blindaje de la compra de patrullas, ambulancias y medicinas… hasta fin de año, porque así lo establece la ley, dijo, su ley, de espaldas a la rendición de cuentas.
La Contralora dictaminó, voz profética, que en ningún momento el góber incurrió en el delito de nepotismo (lacra moral le llama AMLO) con el nombramiento de su primo político, casado con su prima, Eleazar Guerrero, como subsecretario de Finanzas y Planeación, además, claro, de los cargos a sus hijos, además de manejar las direcciones administrativas del gabinete legal, con su experiencia contable en el duartazgo y el fidelato.
PASAMANOS: El secretario General de Gobierno, Eric Cisneros Burgos, sigue en la batalla para destituir al Fiscal.
La Contralora ha anunciado que inhabilitará a funcionarios de Miguel Ángel Yunes Linares y Javier Duarte para que ningún cargo público ocupen los próximos diez años.
El secretario de Salud, Roberto Ramos Alor, compró más medicinas por asignación directa, ahora a Impromed, 300 millones de pesos, y le vale la rendición de cuentas.
CORREDORES: La secretaria de Turismo, Xóchitl Arbesú, reveló que, en efecto, otorgó por asignación directa, es decir, sin licitación pública como lo marca la ley, las concesiones para el Festival de Salsa.
Y de ñapa, el góber rindió, dice, el informe de gobierno del primer semestre con los suyos, desde luego, para que nadie lo cuestione ni evidencie y todos le tiren incienso a su paso.
He ahí, entonces, el estilo personal de ejercer el poder y de gobernar.
BALCONES: Manotazo puro. En el mejor estilo del autoritarismo priista, panista y perredista.
Estando bien con Papá AMLO, los ángeles y querubines pueden irritarse.
Allá ellos.
Y es que si cada uno de los funcionarios anteriores actuaron de tal manera se debe única y exclusivamente a que “una mano mece la cuna”, la mano, claro, del góber.
Ellos están, como en el tiempo aciago y sombrío del priismo, para blindar en todo y con todo al jefe del Poder Ejecutivo.
Y cuidado y se rebelan, porque entonces, con el apoyo de AMLO, bien podrán ser lanzados del paraíso como de hecho y derecho otros morenistas han sido lanzados, entre ellos, los diputados Amado de Jesús Cruz Malpica, José Magdaleno Rosales Torales y Eric Iván Aguilar López.
PASILLOS: Son los hombres del poder y con poder.
Y si ellos se declararon ángeles de la pureza por el hecho de militar, según dicen, en la izquierda, y en la izquierda de MORENA, en ningún momento del PRD, el PT o el Movimiento Ciudadano, entonces, han incurrido en las mismas prácticas políticas que descarrilaron al PRI y el PAN.
El autoritarismo. El absolutismo. El nepotismo. El amiguismo y cuatismo. El tráfico de influencias. El conflicto de intereses. La compra de insumos y materia prima por asignación, es decir, por dedazo.
Pero, bueno, la Constitución Política de Veracruz convierte al gobernador en un político poderoso y su palabra es la ley.
Y el góber ha dado y seguirá asestando el manotazo, pian pianito, con bajo perfil, en un juego del poder.
VENTANAS: Apenas vamos en el primer semestre y el puño y el músculo de Cuitláhuac ha sido mostrado.
Digamos, que “tira la piedra y esconde la mano” y manda a sus soldados y su ejército a la batalla y con todo el arsenal por delante.
El único objetivo, fijar la línea desde diferentes posturas y ángulos en un lenguaje polisémico y subliminal para que todos entiendan.
PUERTAS: Miguel Angel Yunes Linares era directo y sin recámaras ocultas. Sí o no.
Javier Duarte pretendía echar el rollo, pero se manifestaba y contradecía de forma brutal.
Fidel Herrera Beltrán cabeceaba a todos y a la mayoría dejaba contentos.
Miguel Alemán Velasco vivió lejano de Veracruz, en su mundo de cristal.
Patricio Chirinos Calero fue el otro gran ausente, pues su tiempo de gobernador la pasó en Los Pinos con Carlos Salinas, a tal grado que Porfirio Muñoz Ledo le apodaba la ardilla.
Dante Delgado Rannauro era directo, sin rodeos, al pan pan y al vino vino, en un activismo social sin precedente encaramado en la Solidaridad salinista.
Fernando Gutiérrez Barrios apostó a un proyecto político nacional desde Veracruz y cuajó.
Cuitláhuac, con su estilo personal de ejercer el poder. Los manotazos, entre otros, para que los suyos defiendan su concepción política.
CERRADURAS: Cuitláhuac gobierna con sus apóstoles.
El góber fija la línea y los apóstoles la manifiestan, predican y aplican con firmeza.
Pronto quizá darán el siguiente paso, al mejor estilo de Porfirio Díaz Mori, “pan o palo”.
Y es que con tanto poder (el presupuesto, las policías, los penales, los diputados locales y federales, los senadores, etcétera), un gobernador puede construir y destruir a quien quiera, y le vale, sin temor a ser juzgado en un tribunal.
Y si aquel quiere su revocación de mandato, allá él, porque en Veracruz nomás no pasa ni pasará.
Es el reino y el tiempo de Cuitláhuac.
Y aun cuando el otro Cuitláhuac, el rey azteca, solo duró 80 días en el poder pues un ataque de viruela lo llevó a la tumba, el Cuitláhuac jarocho tiene por delante 5 años y medio para ser y estar.