Veracruz, México.- Los diputados federales Jorge Carvallo Delfín y Alberto Silva Ramos, ambos del PRI, están vinculados con la red de farmacéuticas acusadas de proveer al Gobierno de Veracruz de medicamentos falsos contra el cáncer y pruebas apócrifas para detectar el VIH.
Carvallo Delfín, ex secretario particular de Javier Duarte, es pariente directo de la familia Beceiro, que durante la Administración del ex Gobernador Fidel Herrera constituyó un conglomerado de empresas beneficiario de contratos millonarios en los últimos dos sexenios de la entidad.
Las firmas vinculadas a los Beceiro son Maxbec, S.A. de C.V.; Especialidades Médicas del Sureste, S.A. de C.V.; Grupo Empresarial Heberen, S.A. de C.V.; Labssa, S.A. de C.V., y Lidmed, S.A. de C.V.
En todos los casos, de acuerdo con las actas constitutivas, los representantes legales son Andrés y Rocío Beceiro Delfín, primos hermanos de Carvallo Delfín e hijos de Andrés Beceiro López, presidente de la Alianza Ciudadana de Empresarios Veracruzanos y allegado a Fidel Herrera.
Esas empresas fueron denunciadas por la actual Administración, encabezada por el panista Miguel Ángel Yunes, de proveer de medicamentos falsos a la Secretaría de Salud estatal desde 2010.
En concreto, se denunció que productos del laboratorio Roche fueron clonados y desprovistos de su principio activo, por lo que incluso hubo niños con cáncer que como tratamiento prácticamente recibieron agua destilada.
Las denuncias presentadas por Yunes, señalan que tan sólo Maxbec, cuyo representante legal es Andrés Beceiro Delfín, facturó 109 millones de pesos entre 2006 y 2013 en contratos con el Gobierno veracruzano.
Asimismo, de acuerdo con el portal de compras médicas del IMSS, en 2014 la empresa facturó 563 mil 839 pesos en gasas, jeringas, telas adhesivas y catéteres al Hospital de Especialidades No. 14 “Adolfo Ruiz Cortines” de Veracruz.
Carvallo Delfín, quien en 2015 fue titular de la Sedesol en Veracruz y en la actualidad es secretario de la Comisión de Agricultura y Sistemas de Riego en la Cámara baja, ha negado tener vínculos con las empresas denunciadas.
Lo anterior pese a que los representantes legales de las firmas son sus primos y él ha sido acusado, según medios locales, de favorecerlos con contratos.
“Lo que hicieron con los niños veracruzanos es un crimen deleznable, atroz, que no puede quedar impune, pero tampoco voy a permitir que sea utilizado como ariete político para quienes se empeñan en la guerra sucia y en tender cortinas de humo”, escribió en Facebook el martes 16 de enero.
En tanto, Alberto Silva Ramos, además de haber sido dirigente estatal del PRI en 2015, se desempeñó como funcionario en los Gobiernos de Herrera y Duarte.
El también coordinador de Comunicación Social y Secretario de Desarrollo Social con Duarte, está involucrado directamente en el otorgamiento de contratos a empresas vinculadas a la familia Beceiro.
Es acusado, asimismo, de complicidad en el pago de 514.9 millones de pesos a empresas fantasma para campañas inexistentes en medios de comunicación.
POR: GRUPO REFORMA/ Héctor Gutiérrez