•El equipo represivo de Javier Duarte y Arturo Bermúdez integrado con policías, exmilitares y malandros para desaparecer personas
•Familiares siguen sospechando de exsoldados en corporaciones de seguridad en Veracruz durante el sexenio anterior
•Casi cuatro años de ser levantado por uniformados la tarde del 5 de diciembre en La Patrona
•Con la detención de 16 policías estatales esperan avances para dar con Alexander desaparecido en Amatlán
Por Arantxa Arcos
Alexander Figueroa López fue levantado por elementos del Ejército que irrumpieron su casa. Al grito de “666” arrancaron las unidades estacionadas en la localidad La Patrona, del municipio de Amatlán de los Reyes.
Con el acto, cuatro casas y sus habitantes quedaron sobre el piso, golpeados y violentados por varones en bota táctil, chalecos antibalas, armas cortas y largas.
Las voces de esa tarde, del 5 de diciembre del 2014, son recordadas a la perfección por su madre, Ana Lilia López Ortiz, quien se mantiene al pendiente de las audiencias de juicio oral en contra de ex policías y tres mandos policiacos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) detenidos por el delito de desaparición forzada.
Ana se atrinchero en las afueras del Reclusorio Zona 1 -Pacho Viejo- con su familia, para exigir respuestas a la desaparición forzada que sufrió Alexander, alrededor de las tres de la tarde de ese 5 de diciembre.
La puerta en casa de Ana no fue azotada. El “escuadrón de la muerte” llegó formado, atendiendo órdenes de un superior. Ana Lilia sospechó que la voz que emitía las indicaciones al comando armado, correspondió al ex director de la Fuerza Civil y actualmente procesado por quince desaparecidos en 2013, entre ellos, cuatro menores.
El levantón de Alexander fue perfecto. No dejaron rastro para buscarlo en las siguientes horas o días. El municipio de Amatlán estaba custodiado en los accesos por elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) y elementos de la Policía Estatal.
“No era secuestro, revisaron la casa de mis suegros, la mía, la de mi cuñada y otra cuñada, en total fueron cuatro a las que entraron. Nos amarraron, nos golpearon, había niños y estos elementos eran resguardados por la SEDENA. Nunca presentaron orden de aprehensión o cateo”.
La sospecha de Ana Lilia, madre de Alexander Figueroa, contradice lo emitido en recientes fechas.
A horas de la detención y enjuiciamiento de los 16 policías estatales con su jefe, el ex director de la Fuerza Civil, Roberto “N”, el mandatario estatal refirió que “absolutamente ningún militar en activo participó en este proceso de desaparición forzada”.
“Los militares cuando están en funciones no pueden desempeñar tareas de policía, en este caso, dos de las personas que están vinculadas con estos lamentables hechos, pero cuando llevaron a cabo estas actividades ilícitas no formaban parte del Ejército Mexicano”, añadió en entrevista en Palacio de Gobierno.
Los dos ex integrantes del Ejército Mexicano, a los que se refirió el gobernador, uno ocupó la subsecretaria y ascendió a la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), por la renuncia de su jefe, vinculado en proceso penal por el delito de enriquecimiento ilícito.
Hablamos de José “N”, buscado por la Fiscalía General del Estado (FGE), considerado prófugo de la justicia, al estar relacionado en estos quince casos de desaparición forzada en el año 2013.
El segundo, Roberto “N”, ex director de la Fuerza Civil que llegó a la SSP recomendado por José “N”. Este exmilitar cuenta con el más alto nivel de capacitación en el Ejército, donde trabajó y se dio registró como miembro del Grupo Aeromóvil de las Fuerzas Especiales.
“Está integrado por gente limpia, por gente honesta, no tienen nada que ver. Ni ninguno de sus miembros en los hechos gravísimos del gobierno anterior” complementó Yunes Linares en su entrevista de Palacio de Gobierno.
Ha pasado casi una semana de la detención de los servidores y funcionarios públicos, ocurrida el pasado miércoles 7 de febrero, la madre de Alexander, Ana Lilia insistió en señalar a elementos adiestrados, armados y con permiso de la autoridad estatal para cometer delitos.
“Meza fue una de las personas que tengo la plena seguridad que tuvo que ver con la desaparición de mi hijo. Él era el brazo ejecutor de Bermúdez Zurita, como todos lo sabemos, no sólo desaparecieron a mi hijo, sino a muchos. Por eso señalo a Roberto Meza como la mano ejecutora para la desaparición forzada de mi hijo Alexander, de la mano con Bermúdez y solapado por el gobernador de ese tiempo, Javier Duarte de Ochoa” reprochó Ana.
Recordar el levantón que sufrió Alexander orilló a Ana para presionar la lona cargada en sus manos, respirar y no derramar una sola lágrima para detallar que el joven desaparecido se encontraba en casa, con su familia.
Al momento de irrumpir la vivienda y llevárselo esposado, con rumbo desconocido por el comando armado y uniformado, Alexander padecía neumonía y hepatitis, imposibilitado de consumir bebidas alcohólicas, tabaco u otro tipo de estupefacientes.
El empleo como campesino, con su padre, se postergó por algunos días. El ganado no fue vigilado por Alexander, se dedicó a cuidar su salud hasta que lo secuestraron.
“Confío en el señor gobernador, que es quien me va a dar la respuesta de mi hijo Alexander. Hay confianza en ellos que nos van a dar la respuesta” sentenció la madre, Ana Lilia López Ortiz.
El levantón y desaparición de Alexander podría estar incluido en los 39 asuntos por desaparición forzada que involucran al Ejército y la Marina, en trámite de la Procuraduría General de la República (PGR).
Hasta el martes 8 de noviembre del 2016, la PGR difundió que los casos ocurrieron en 16 estados del país; Colima, Chiapas, Nuevo León, Morelos, Oaxaca, San Luis Potosí, Sonora, Tabasco, Yucatán, Guerrero y Michoacán.
Entidades como Veracruz y Tamaulipas encabezaron la lista de siete casos de desaparición forzada, le siguió Coahuila con cinco, Baja California con cuatro y Chihuahua con tres.