Redacción El Piñero
El inicio de la semana trajo un desplome significativo en el mercado de las criptomonedas, con Bitcoin y Ethereum registrando sus mayores caídas en meses. Este retroceso se atribuye a varios factores, entre ellos el aumento de las tensiones geopolíticas en Medio Oriente y la creciente preocupación sobre la economía estadounidense.
Bitcoin, la criptomoneda más grande por capitalización de mercado, perdió hasta un 15% de su valor, cayendo por debajo de los 50,000 dólares por primera vez desde febrero. Ethereum, la segunda criptomoneda más grande, sufrió una disminución del 22% en un solo día, su mayor caída desde mayo de 2021.
Las empresas relacionadas con las criptomonedas también se vieron afectadas. Coinbase, uno de los principales intercambios de criptomonedas, experimentó una caída del 17% en sus acciones. MicroStrategy, una empresa con grandes inversiones en Bitcoin, vio sus acciones caer un 21%.
Factores detrás de la caída:
- Tensiones en Medio Oriente: Las amenazas de Irán contra Israel tras el asesinato de un líder de Hamás aumentaron la incertidumbre en los mercados financieros globales.
- Dudas sobre la economía estadounidense: Los datos de empleo en EE.UU. publicados la semana pasada fueron peores de lo esperado, generando preocupaciones sobre la fortaleza de la economía más grande del mundo.
- Apetito por el riesgo: Los inversores se volvieron más cautelosos y redujeron su exposición a activos considerados de mayor riesgo, como las criptomonedas.
La caída en el mercado de las criptomonedas se sumó a las pérdidas en los mercados de valores a nivel mundial. El Nikkei 225, el índice bursátil japonés, cayó más del 12%, mientras que el S&P 500, el principal índice bursátil de EE.UU., perdió un 3%.
Chris Beauchamp, analista jefe de IG, comentó: “Los mercados están en un estado de agitación total debido a la mayor caída diaria del Nikkei 225 desde 1987, que ha borrado las ganancias del índice durante el año. La volatilidad medida por el VIX (índice del miedo) está en su nivel más alto en dos años”.
Beauchamp agregó: “En Wall Street, los inversores siguen huyendo de las acciones tecnológicas. Es una demostración perfecta de lo que ocurre cuando todo el mundo intenta vender a la vez. Estos movimientos no se detienen de un día para otro y es probable que tengamos un verano con alta volatilidad, especialmente mientras esperamos los acontecimientos en Oriente Medio”.