Luis Velázquez Escenarios
09 de abril de 2019
UNO. Trece magistrados, en el limbo
Desde hace cuatro meses y medio de la era Cuitláhuac siguen acéfalas 13 magistraturas del Tribunal Superior de Justicia. Serán catorce cuando el magistrado Alberto Sosa se jubile al cumplir los 70 años de edad.
Y el gobernador “las deja hacer y las deja pasar”, expresando su filosofía política sobre la procuración de justicia.
Incluso, y cuando ha estado a punto…de pronto, marcha atrás.
El politólogo Ramón Benítez tiene algunas hipótesis sobre los pretextos que mueven al jefe máximo de la revolución morenista en Veracruz para actuar así:
Una. El góber creerá que está ahorrando recursos al dejar de cubrir los salarios de los trece magistrados.
Dos. Pensará que son innecesarios y con los encargados de cada despacho basta y sobra.
Tres. Luego del fracaso en la LXV Legislatura para destituir al Fisca, el góber tendrá precaución de que de nuevo sea bloqueado por los legisladores de oposición.
La mayoría manda… hasta que la minoría lo aguanta y permite.
DOS. “El veinte no le ha caído”…
Cuatro. Creerá que así tiene en jaque al Tribunal Superior de Justicia.
Incluso, los aspirantes a la silla de los magistrados en tensión cardiaca. En cada nuevo amanecer esperando la luz verde para. El destino de un montón de abogados en las manos del jefe. Yo soy el Estado dijo Luis XIV cuando tenía 14 años de edad y era el patrón.
Cinco. “El veinte no le ha caído” al góber, pero el tiempo se agota. Y el destino es canijo.
Por ejemplo, luego “de la plenitud del pinche poder”, Fidel Herrera Beltrán está enfermo.
Javier Duarte, preso en el Reclusorio Norte de la Ciudad de México.
Miguel Ángel Yunes Linares tuvo “una probadita de gloria” tan efímera de dos años.
Al momento han pasado 4 meses y medio de la era Cuitláhuac y el desencanto social sobre MORENA es creciente, a tal grado que si hoy existiera una revocación del mandato sería devastador en las urnas en contra del góber.
TRES. Más nombramientos en puerta
Seis. Javier Duarte creyó que podía utilizar a todos y hacia el final del sexenio, la realidad fue avasallante: A, fue desaforado. B, debió huir como un prófugo de la justicia, temeroso de una captura. C, se exilió en Guatemala. D, vivió unas semanas con otro nombre. E, fue capturad. F. Sentenciado a 9 años de cárcel.
Además, usado por la elite priista del altiplano y hasta por los suyos.
Dueños del poder llegan sentirse paridos por los dioses. Pero la adversidad es canija. Y al góber de MORENA bien se le puede revertir su desidia por las catorce magistraturas del Poder Judicial.
Siete. El góber va ganando fama de ser un político necio que a pocos, excepcionales, escucha o podría escuchar. Pero el tiempo es canijo.
Por ejemplo, hacia final del año, tendrá encima nuevos nombramientos. Entre ellos, el titular del Órgano de Fiscalización Superior y los Consejos de órganos autónomos, como el IVAI, Instituto de Acceso a la Información.
Y si se juntan los nombramientos de los magistrados con los nuevos en puerta, entonces, enfrentará una espantosa olla de presión.
Y más, si se recuerda que el góber no ha podido con Miguel Ángel Yunes Linares y su Fiscal carnal.
Tampoco ha podido con la rectora de la Universidad Veracruzana quien insiste en el pago de los más de mil millones de pesos al SAT, Sistema de Administración Tributaria, y lo anda cazando.
El góber terminaría no como “El llanero solitario”, sino como “El llanero solitito”.