Luis Velázquez
26 de abril de 2018
EMBARCADERO: El subcomandante Marcos tuvo prisa social, pero su legítimo sueño ha muerto… En el mes de diciembre del año 2007 anunció que se retiraría por completo y diez años cuatro meses después, ha cumplido… Una, dos, semanas anteriores tuvo una reaparición mediática como el comandante Galeano y luego enseguida, el silencio… Está cumpliendo 61 años, una edad que imposibilita toda actividad guerrillera… Además, la versión de que tenía cáncer según se lo dijera un representante de aquella Comisión de Concordia y Pacificación, Jaime Martínez Veloz, a don Luis H. Álvarez… Y aun cuando luego fue desmentida, quedó claro que estaba enfermo… Incluso, trascendió que con frecuencia viajaba de Chiapas a la Ciudad de México para un tratamiento, cuya naturaleza siempre fue manejada con discreción… De hecho y derecho, Marcos se ha retirado y los indígenas de Chiapas siguen igual de jodidos… O peor… Y peor, porque el EZLN levantó demasiadas expectativas en Chiapas, el país y el extranjero de que luego de Ernesto “El che” Guevara, la utopía social aterrizaría en la tierra…
ROMPEOLAS: En 1994 ocurrieron muchas cosas importantes en México… Una, el subcomandante Marcos y el Ejército Zapatista de Liberación Nacional… Dos, el asesinato de Luis Donaldo Colosio Murrieta… Tres, el crimen de José Francisco Ruiz Massieu, secretario General del CEN del PRI y ex cuñado de Carlos Salinas de Gortari… Y cuatro, el videodestape post morten de Colosio por Ernesto Zedillo como el candidato presidencial emergente… Pero a estas alturas, el ídolo social encarnado en Marcos se ha desvanecido por completo… Se acabó la utopía… Y lo peor, sin ningún resultado social para los indígenas, los llamados “pobres entre los pobres”… Once millones en el país, un millón en las ocho regiones étnicas de Veracruz… Tanto fue el impacto de Marcos que, por ejemplo, don Julio Scherer García, el gran director que fue del periódico Excélsior y fundador de Proceso, acarició la esperanza y el sueño de incursionar en la televisión y en Televisa debutó con una entrevista exclusiva con Marcos…
ASTILLEROS: Los reporteros del país y muchos, muchísimos del extranjero, además de los intelectuales y activistas, y hasta políticos, soñaban con viajar a las entrañas de la sierra chiapaneca para conocer y platicar y entrevistar a Marcos… Carlos Salinas nunca pudo con él… Y Ernesto Zedillo lo desenmascaró en exclusiva en Televisa diciendo que era originario de Tamaulipas, miembro de una familia compuesta por ocho hermanos, de nombre Rafael Sebastián Guillén Vicente, maestro en una universidad de la Ciudad de México… Pero para entonces, el impacto de Marcos en el mundo estaba en su dimensión estelar… Todo fue un efecto ilusorio y mediático que habría alimentado el ego de Marcos… Y aun cuando el gobierno construyó caminos y escuelas, nunca se detuvo en la calidad de vida de los indígenas, alentando, por ejemplo, la creación y recreación de fuentes de empleo, el principio fundamental para enaltecer los días y los años… Por el contrario, el PRI sigue mandando en Chiapas con Manuel Velasco Coello, el gobernador que en el mesianismo permitió que cuatro indígenas lo cargaran en hombros y lo pasearan en el pueblo…
ARRECIFES: Con todo y su vida social efímera, Marcos alcanzó la gloria y entre los nostálgicos habrá quienes aseguren que también entró a la inmortalidad… Su pipa legendaria, los dos relojes que usaba copiando a “El che” Guevara, su cachuchita y siempre vestido de negro… Su fama llegó a tanto que hasta Cuauhtémoc Cárdenas viajó a Chiapas para entrevistarse con él… Pero con todo, en la disputa ideológica, se enfrentó con el PRD y retó a su candidato presidencial, AMLO, a un debate, tiempo cuando “El peje” compitiera con Felipe Calderón, y quien como diputado federal se opuso a que los zapatistas subieran a la tribuna parlamentaria y que valió porque ellos fueron oradores en el Congreso de la Unión… Ahora AMLO es candidato presidencial y Marcos, en el limbo social, político y mediático, y sólo el periódico “La Jornada” le sigue dando espacio cuando levanta la mano…
PLAZOLETA: En un año, 1994, Marcos se creó y recreó un aura de leyenda… Su padre, dueño de una tienda de muebles en Tampico, era feliz cuando las chicas de Tamaulipas le gritaban “suegro”… Una de sus hermanos, Mercedes del Carmen, también conocida como Paloma, salió priista… Y de los seis hermanos, nunca, jamás, se supo nada… Pero a Marcos, igual que a la mayoría de políticos y de socialistas y demás chivas, anexas y conexas, le ganó el protagonismo, el excesivo culto a la personalidad, yo soy la verdad, antes y después de mí… Incluso, desde algún rincón de Chiapas hasta profetizó en contra de Barack Obama, recién elegido presidente de Estados Unidos, asegurando que “quienes lo han tomado como faro se decepcionarán”… Los indígenas de Chiapas, que tomaron a Marcos, alias Galeano, como faro también se habrían desencantado… Después de él, la vida de todos ellos en la penumbra social…
PALMERAS: “El ídolo encapuchado se desvaneció” intituló El País un reportaje de Luis Pablo Beauregard en 2014… Nunca, claro, Marcos alcanzará la estatura y la proyección de su héroe, Ernesto Guevara… Tampoco entró a la historia de las ideas a la par que su filósofo, filósofo filoso él mismo llegó a creerse… Menos alcanzó la dimensión social, por ejemplo, del obispo Samuel Ruiz… Muy de vez en vez reaparece por ahí con esporádicos comunicados, al mismo tiempo, intrascendentes… Incluso, en La Jornada ya lo envían a páginas interiores cuando antes, flor de un día, en portada y a cada rato… Los indígenas de Chiapas, en la miseria, la pobreza y la jodidez… Hasta el escritor José Saramago, premio Nobel de Literatura, y Danielle Mitterrand, la esposa del ex presidente de Francia, viajaron a Chiapas para conocerlo y hablar con él… ¿Y?… Y de nada sirvió… Marcos se equivocó de tiempo… Debió vivir en 1810 para irse a la guerra de Independencia con Miguel Hidalgo o José María Morelos… O en 1910, para luchar al lado de Francisco Ignacio Madero, Pancho Villa o Emiliano Zapata…