Luis Velázquez
22de abril de 2019
EMBARCADERO: Hemos llegado al rincón más jodido del infierno… La masacre en Minatitlán la noche del viernes 19 de abril, un día antes de la resurrección de Jesús… En una fiesta familiar, trece muertos, 5 mujeres y 7 hombres… Pero, vaya paradoja de la vida, un bebé de un año en brazos de su señora madre… Si en la yunicidad, en una colonia popular de Coatzacoalcos, fueron asesinados 4 niños, todos menores de diez años, y sus padres, ahora, en el sexenio de MORENA, este peor infierno… La madre trató de proteger a su hijo de los balazos, pero una bala tronó en la cabeza del bebé… Según la secretaría de Seguridad Pública, los sicarios buscaban a un malandro… Y sin piedad ni misericordia, sin prudencia ni mesura, con toda la saña y la barbarie por delante, fueron contra todos… Iban por uno y mataron a trece…
ROMPEOLAS: Los carteles, crecidos al castigo… La inseguridad, con una ola de violencia, desorbitada… Y la impunidad galopante, con todo y que el Fiscal alardea tanto, a tono con su carácter soberbio y frívolo, su risita perpetua para todo, queriendo acaso parecerse a Miguel Alemán Valdés con su risa encantadora que tanto subyugaba a las mujeres… El respeto a la vida, cierto, se ha perdido… Pero más todavía, el respeto a la dignidad humana… El respeto a la libertad… Y desde luego, la cada vez nula posibilidad del legítimo derecho de los 8 millones de habitantes de Veracruz a la felicidad… Nadie puede ser feliz en un Veracruz sórdido y siniestro donde la delincuencia organizada y común marca la agenda pública y las fuerzas de seguridad y de justicia son reactivas y van actuando, nomás para levantar la estadística de la muerte…
ASTILLEROS: Trece personas rematadas, entre ellos, un bebé de 9 meses… Cinco lesionados… La crónica del reportero Ignacio Carvajal García se detiene en un detalle estremecedor… Las agencias funerarias de Minatitlán quedaron sin carrozas… Debieron rentar más para dar abasto en el servicio fúnebre… En la pista un tecladista tocaba la canción “La vida es un carnaval”… Los hombres apenas iban en la segunda ronda de cartones de cerveza… Y de pronto, la llegada violenta de los sicarios… La madre del bebé lo quiso acurrucar entre sus brazos… Es el Veracruz de Cuitláhuac García Jiménez… La guerra entre bandas delincuenciales en el sur de Veracruz… Semanas anteriores, en Cosoleacaque, los sicarios mataron a tres chambalanes de una quinceañera que ensayaban el vals en la colonia Carlos Salinas… En un cabo de año, en la colonia Insurgentes, otro joven rematado y en el hospital, donde los pistoleros se metieron con violencia, dueños del día y de la noche, impunes…
ARRECIFES: Las 13 personas, incluído el bebé, fueron rematados… Insaciables, los malosos saben que nada pasa… Y si de pronto, por ahí, digamos, apareciera la policía en tiempo y forma, ni modo, a rafaguearse entre sí pues para eso fueron contratados… Y Veracruz, fuera de control… Sin ningún orden… El Estado de Derecho en el fondo del infierno… El Estado Delincuencial domina los días y las noches… Luego de la masacre, como describe What Whitman la guerra, otro infierno, los sobrevivientes buscando a sus familiares entre los muertos, en tanto una mujer seguía rezando y entre padrenuestros y avemarías exclamando… “¡Dios, que se haga tu voluntad!”, como si Dios aprobara una matanza, a menos, claro, que recordara a Huitzilopochtli…
PLAZOLETA: La vida es así en una fiesta familiar en la colonia Obrera del municipio de Minatitlán, allí mismo donde en el Valle de Uxpanapa, los hombres organizados en guardias comunitarias detuvieron a un hombre que baleara a su esposa por la espalda y lo lincharon… Un sobreviviente de la matanza dijo: “Muchos nos tiramos al suelo… Escondíamos la cabeza… Pero los pistoleros obligaron a los hombres a que los miraran, cara a cara, y así, los remataban”… Luego de Soledad Atzompa, en que los indígenas detuvieron, lincharon y quemaron vivos a 6 malandros, el ciudadano común y sencillo pensaba que nadie quedaría para el asombro humano… La perplejidad quedó deslumbrada con la masacre en el sur de Veracruz… Y como dice la vecina, “y lo que falta por verse” ante la incapacidad manifiesta de la secretaría de Seguridad Pública y la Fiscalía…