Luis Velázquez
Veracruz,. 28 de abril de 2017.-EMBARCADERO: Los animalistas de Veracruz la están pifiando… Ellos, claro, merecen todo el respeto del mundo cuando de pronto, zas, miran un perrito o un gatito callejero, hambriento y cojeando, a la intemperie en el día y la noche, lo levantan y lo llevan a casa, pues el dolor del alma y el corazón se les apretuja… Incluso, conmueve la ternura con que hablan y cuidan de los animalitos, como Himmler, el súper ministro de Defensa de Adolf Hitler, quien solía entrar en la madrugada a su casa sin zapatos, en calcetines, caminando de puntillas para evitar que sus pajaritos enjaulados despertaran… Y/o la ternura con que Ernest Hemingway cuidaba de los cincuenta gatos en la finca en Cuba, a los que daba de comer, mientras en la alberca la artista de moda y en su turno nadaba desnuda… Pero hay un Veracruz donde los animalistas ni idea tienen de la tragedia que viven los perros callejeros… Es la mayoría, casi todas, cabeceras municipales de norte sur y de este a oeste en el mercado popular, donde los perritos sin dueño merodean a la caza de un pedazo de carne, un hueso, unas tripas, unos pellejos… Y si fueran ahí, el corazón se les destrozaría en automático ante la incapacidad, primero, de adoptarlos pues suman decenas, y segundo, el desdén del alcalde en turno, indiferente a la causa… Y lo peor, que a ninguno de ellos el asunto ocupa… En tiempos lejanos, el alcalde y la Jurisdicción Sanitaria lanzaban campañas sanitarias y/o en todo caso, sumaban tantos los perros callejeros alrededor de las carnicerías en el mercado que operaban con una razzia, y todos, claro, al matadero…
ROMPEOLAS: En cosas de mascotas se rompen géneros… La hijita de Carlos Romero Deschamps, dueño del sindicato petrolero, suele treparse al avión de su padre para pasear en los cielos de México a su par de gatitos, parece, o serán perritos… Pero, por ejemplo, el poeta Gérard de Nerval solía pasar una langosta en el malecón de París a la que alimentaba y llevaba al veterinario y se sentía orgulloso… El destino, sin embargo, es canijo, y un día, se colgó de una farola y dejó a la pobrecita langosta en la orfandad.. Alguien amigo la recogió y la llevó a su cantina preferida para que se la prepararan en botana para los amigos… Baudelaire, el otro gran poeta francés, tenía una tarántula de mascota metida en un tarro de cerveza y que colocaba en la ventana de su departamento… En Cambridge, a Lord Byron le prohibieron meter perros y gatos… Virgilio, el gran poeta de la antigüedad, tenía una mosca de mascota y a la que compuso versos y sepultó en un mausoleo… Charles Dickens tuvo de mascota un cuervo y cuando muriera lo embalsamó para tenerlo cerca el resto de su vida… Dorothy Parker tenía un cocodrilo de mascota y también paseaba con él, asegurando que se lo habían dado de regalo para espantar a su doncella… Karime Macías, la esposa de Javier Duarte, tenía dos caballos de carrera como sus mascotitas y que según la fama pública fueron comprados con cargo al erario para su felicidad total… Y ahora cuando la Yunicidad expropió la casita rústica a la orilla del río Papaloapan en Tlacotalpan y también el rancho “El faunito”, incluidos los 190 cuadros pictóricos, entre ellos, de Diego Rivera y Botero, ya se verá el destino del par de caballitos… Según las versiones, Erick Lagos, el diputado federal que fuera “de todo y sin medida” en el Fidelato y el Duartazgo tenía un dinosaurio de mascota… Salma Hayek tiene en su castillo en París un zoológico y que incluye, parece, hasta una víbora como aquella con la que salió bailando en una película…
ASTILLEROS: Una amiga tiene en su casa unos ocho gatitos y perritos, todos callejeros, que un día levantó al pasar y mirarlos a la intemperie… Entre ellos hay un par de gatitos que sólo llegan de noche a cenar y dormir… ¡Ah!, pero también, puntualitos, como horario de burócrata, llegan a desayunar y comer y a veces echan la siesta y luego se van, como cualquier ser humano que todos los días sale de casa a trabajar… Otras veces, cuando andan con las pilas bajas comen y duermen la mona debajo de un árbol… En la Ciudad de México, los malandros han descubierto una nueva forma de sacar billete, la siguiente: secuestran a las mascotas de los niños, segurísimos de que los padres pagarán el rescate millonario que sea, pues de por medio se atraviesa el dolor y el llanto de los niños… Un día, a Roberto Borge Angulo, entonces gobernador de Quintana Roo, se le perdió su perrito llamado “Simón”… Entonces, publicó un anunció en la radio y la televisión que decía así: “Simón, regresa, te extrañamos”… La pérdida de Simón fue, digamos, un asunto de Estado, pues los escoltas y policías se lanzaron a la calle para buscarlo… Se ignora, por ahora, el principio del mundo en que los perritos y gatitos y demás animalitos se volvieron mascotas, pues en la Biblia ninguna palabra hay… Vaya, nunca se dice que Eva y Adán tenían una mascota para entretenerse ni antes en el paraíso ni luego en el infierno cuando comieron la manzana del mal para parecerse a Dios…