*Dávila en conferencia de Prensa, 18 de junio en casa de campaña de Nueva Alianza
Luis Fernando Paredes Porras
Tuxtepec, Oaxaca.- Con el calor que comienza a hacerse menos con las lluvias, disminuye la ansiedad de tomarme una cerveza y entrar a la primera cantina que se me atraviese en el camino, tenga rokola o no, el chiste es apaciguar la sed.
Pero cuando la sed no es el motivo de ingerir cerveza sino la convivencia, la música puede ser un elemento de primera necesidad. Así van surgiendo las voces valientes que piden el karaoke y se divierten haciendo en ocasiones padecer a quienes, entre trago y trago intentar no hacerles caso o reírse con ganas y sin el afán de molestar.
Un placer extraño me provoca desde que la conocí, incluso juego con los amigos al decir que es mi fantasía y desde hace varias décadas se mantiene en el gusto del pueblo, no hablo de la cerveza sino de Francisca, la del Barrio.
Y aunque muchos no estarán de acuerdo conmigo, sostengo que la política se parece a los rituales de una cantina. Pero de eso les platico después y con una mesa de un metro cuadro de por medio. Aprovecho para saludar a mi querido amigo Javier quien me estuvo albureando haciendo gala de sus amplios conocimientos cantineros, ahora ya domesticados. En esa ocasión no pusieron canciones de Paquita la del Barrio, aunque estábamos en el barrio abajo de Tuxtepec y por supuesto ¡sin albur!
Como un albur de amor, dice la canción, Fernando Bautista Dávila se lanzó como candidato de Nueva Alianza, y sí, el barrio le respalda, por eso de esa manera le he llamado a la serie de entrevistas que estoy realizando para registrar y transmitir desde mi portal “Préstame tu Recuerdo” las razones del por qué se le quiere tanto y se le odia de igual manera. Las muestras de odio hacia su quehacer político fueron noticia fresca cuando se tergiversó un texto del INE con la intención de sugerir que lo habían bajado de la candidatura. Eso motivó a que el pasado 18 de junio los dirigentes locales y estatales de Nueva Alianza desmintieran el hecho e informaran a la comunidad que Fernando Bautista Dávila sigue siendo el candidato del pueblo, el candidato de Nueva Alianza en la búsqueda del voto para ser el edil de Tuxtepec por 3 años más. Y lo que dijo Dávila hizo que el recuerdo de Paquita la del Barrio asaltara mi mente. Sí, la política se parece mucho a una cantina.
En un centro del placer se compra un ambiente falso, o por decirlo de otro modo, un ambiente que no se lleva consigo una vez abandonado los terrenos del rey Baco. En política pretenden inducirnos a votar por ellas o ellos con discursos falsos, de eso que se pagan con fichas para poder bailar mientras dura el romance de la canción o de la elección. En la cantina uno se conduce con rituales de respeto a fin de preservar la integridad, igual que en la política a fin de conservar el registro, pero una vez que se caldea el ánimo, se convierte en una batalla campal de mentadas de madre, algunos golpes o incluso, la presencia de una mayor desgracia. Igual que en la política pues.
Dice la Iguana que cada que descubre a un humano tirando basura a su arroyo Moctezuma para seguir contaminándolo, como si fuera mingitorio cantinero, le canta el pedacito aquel – sin albur – de Paquita la del Barrio…¡te suplico que también, me saludes a la tuya! Por eso cuando Dávila le manda un saludo respetuoso a los partidos que le han impugnado y asegura, lo seguirán haciendo, pensé en que voy a invitar a Javier una cerveza para que siga luciendo su habilidad de alburear con un lenguaje tan florido y es que, el que se lleva, se aguanta.
Y como aseguran que las preferencias electorales están claras en Tuxtepec con 20 puntos arriba en las encuestas, dice Dávila que “gracias, te agradezco tu impugnación, y sin hacer tanta bulla, te suplico que también, me saludes a la tuya…”bueno no lo dijo así, pero yo hasta me lo imaginé con el tonito de Paquita la del Barrio…y me agarró la sed.
