El INE reconoce a Chiapas como un foco rojo en la elección, pues en enero pasado pidió el apoyo de la Sedena y la SSPC para organizar las elecciones en el estado
MORELIA. Renunciaron a sus aspiraciones políticas 935 candidatos en Chiapas y Michoacán, dos de los estados más violentos para aspirantes a cargos de elección popular durante el presente proceso.
Con corte al 23 de mayo, suman 31 aspirantes, precandidatos y candidatos asesinados en el país, de acuerdo con información recopilada por la Organización Editorial Mexicana (OEM). De estos, siete fueron ultimados en Chiapas —el estado con más casos— y cuatro en Michoacán, tercera entidad con más asesinatos de este tipo.
De acuerdo con el Instituto Electoral de Michoacán (IEM), renunciaron 420 candidatos, pero sólo se sustituyeron 353, por lo que en 67 casos los partidos políticos decidieron no competir tras la declinación de sus abanderados.