•La búsqueda de cadáveres en fosas clandestinas de Colinas de Santa Fe concluirá en dos semanas, dice Lucía de los Ángeles Díaz Genao, del Colectivo Solecito
•Inició en agosto del 2016 y hasta la fecha se han localizado 289 cadáveres rescatados en 150 fosas, de los cuales sólo 16 víctimas han sido identificadas
•Solecito, que invirtió un millón de pesos de sus recursos, se encuentra en pláticas con escultor para que elabore monumento a la memoria de lo que pasó
•Fue durante los gobiernos de Fidel Herrera y Javier Duarte cuando los cárteles y los policías usaron ese terreno para sepultar personas y rivales que privaban de la libertad
Ignacio Carvajal/Fotos de Iván Sánchez/blog.expediente.mx/ Para El Piñero de la Cuenca
Veracruz.- La búsqueda de cadáveres en Colinas de Santa Fe está próxima a concluir, informó el Colectivo de Madres Solecito de Veracruz, y ahora proponen que en esa área se construya un monumento a la memoria de las víctimas que ahí fueron lanzadas.
“Que el terreno donde sacamos los cadáveres, se resguarde, que por el momento no se construya ahí nada hasta que haya actores políticos con voluntad para que se construya ahí un monumento”, dijo Lucía de los Ángeles Díaz, vocera del colectivo.
En el último corte, se tiene que han localizado 289 cadáveres que fueron rescatados de 150 fosas, de esos se han identificado a unas 16 víctimas, pero sólo siete han sido entregadas formalmente.
La búsqueda inició en agosto del 2016, y después de varios problemas con la administración de Javier Duarte de Ochoa, pudieron ingresar al predio para sacar los cadáveres con el apoyo de la Policía Científica.
Lucía de los Ángeles recriminó que todo el apoyo vino por parte del gobierno federal, a través de la Policía Científica, que puso material, recursos y elementos preparados que dieron su experiencia para el rescate de los cadáveres.
De la Fiscalía General del Estado, tanto con Luis Ángel Bravo como con Jorge Wínckler, se presentaron diversos problemas, desde el hecho que no hay recursos para efectuar las identificaciones.
Actualmente los forenses en donde se ubican estos restos, en Xalapa, rebosan de cuerpos, cráneos y demás elementos localizados en Colinas de Santa Fe. Quien fuera director de Servicios Periciales, y que tuvo bajo su cargo este resguardo, Gilberto Aguirre Garza, está preso, precisamente, por la desaparición de cadáveres.
El proceso para identificarlos, así como para entregarlos, ha sido tortuoso y lento, comentó Díaz Genao.
Sí encontrar a sus hijos fue complicado, si trabajar en Colinas bajo el sol y en malas condiciones, resultó un reto, otro peor ha sido estar ante autoridades insensibles como las de la Fiscalía General del Estado, remarcó.
El primer caso que se supo de Colinas, fue el del MP adscrito a la operación Veracruz Seguro, Pedro Huesca Barradas, quien fue levantado por criminales apoyados por policías de la SSP durante el gobierno de Javier Duarte de Ochoa.
En enero del 2017, se convirtió en la primera víctima localizada oficialmente entre esos restos.
El MP estaba adscrito a la operación Veracruz Seguro, que encabezaba la Secretaría de Marina Armada de México, fue sometido violentamente al salir de su casa días después de negarse a liberar unos delincuentes presuntamente ligados a un cártel de la delincuencia organizada que habían sido consignados por la Marina por portar armas y un coche con reporte de robo.
La búsqueda en Colinas comenzó en agosto del 2016. Las madres de Solecito dieron rueda de prensa para presentar el terreno y los primeros hallazgos, la opinión pública no acaba de entender lo que había pasado por años en ese terreno asentado a unos 15 minutos del centro de Veracruz.
Las madres adelantaron que esperaban encontrar unos 50 cuerpos, sin embargo, al paso del tiempo, la realidad los superó, el número total de víctimas casi llegó a 300.
Es de remarcarse que las madres toman en cuenta un cadáver a partir de un cráneo localizado, sin embargo, hay varios que se han encontrado sin cabeza, lo que hace suponer que debe haber más víctimas mortales.
Hasta ahora, las madres de Solecito gastaron un millón de pesos en las labores en la fosa más grande de América.
Ellas se allegaron de esos recursos mediante rifas, venta de alimentos, un bazar de ropa usada y donativos a la causa.
“Para un colectivo de madres sin recursos, mover esa cantidad, ya fue algo muy importante”, comentó la activista.
Sobre el terreno indicó que “actualmente estamos a punto de acabarlo. No pasa de dos semanas. Le vamos a dar una repasada a las lagunas, a revisar la zona colindante, Colinas no pasa de dos semanas”.
Durante meses, expuso, las madres laboraron en un esquema de brigadas. También se contrató a personas que hicieran la labor de chapeo y para usar las palas sacando tierra de las fosas localizadas.
En esos días, bajo el sol, de las ocho de la mañana a las dos de la tarde, las mujeres colaboraron y apoyaron a las autoridades para rascar en la tierra y presenciar el horror.
Eventualmente, preparaban refrigerios que compartían entre ellas y los buscadores pagados para soportar la jornada. Los peores días de esta época, resultaron las de calor y lluvia, la maleza creciendo y los moscos causando estragos, pero ni eso las hizo recular.
Las madres de Solecito lograron lo que no pudieron las autoridades Veracruzanas, o lo que ignoraron, encontrar la fosa clandestina del narco más grande de todo el continente.
Para evitar que eso vuelva a pasar -cuenta Lucí Díaz vía telefónica- ya están en pláticas con el escultor Alfredo López Casanova para conseguir una propuesta de monumento a la memoria.
Hasta ahora todo está en pláticas, pero el resto de las madres ve con buenos ojos la idea de perpetuar mediante un monumento lo que ahí pasó, “con la finalidad de preservar la memoria y que esto no vuelva a pasar”.
A las autoridades actuales, agregó, les pedirían que al entregar el predio, ahí se establezca un resguardo especial y que nadie pueda construir, pues al rededor se realizan las obras de la ampliación del puerto de Veracruz.
Ese monumento sería edificado al contar con autoridades sensibles y con compromiso con el tema de los desaparecidos. Las actuales, lo ha dicho, no muestran el interés necesario para evitar las desapariciones y encontrar a los ausentes.
La noticia sobre el hallazgo en Colinas ha recorrido el mundo entero, y se escribieron reportajes de sus protagonistas en los medios de comunicación más importantes de influyentes.
Ante el panorama actual, y la culminación de esa búsqueda, las mamás de Solecito no estarán de manos cruzadas, les toca empujar los procesos de identificación y la entrega, y muy posiblemente, pronto tengan permisos para ingresar a otros terrenos con altas posibilidades de contener más fosas en el puerto de Veracruz, o una segunda búsqueda en Arbolillo, Alvarado, donde se localizaron más de 40 víctimas el año pasado, entre ellas, a unos elementos de la Marina que habían sido secuestrados en el puerto de Veracruz, todo apunta, por integrantes del Cártel de Jalisco Nueva Generación.
