Roberto Polo Hernández| Yolanda Portugal Guzmán
Loma Bonita, Oaxaca.- Son vacaciones de Semana Santa. Y como es costumbre, Loma Bonita tendrá visitantes, quienes buscarán espacios de recreación, en aquellos arroyos y ríos que hoy, sin asistencia, lucen abandonados.
Es por ello que El Piñero de la Cuenca visitó los afluentes más concurridos, donde se pudo constatar que la mano del hombre no ha hecho nada por conservarlos:
AGUA CLARITA, fue el arroyo más famoso de Loma Bonita, y que en los últimos años había estado en decadencia, ha vuelto a funcionar, se pueden observar mesas a medio caudal y limpio, no obstante, el restaurante continúa en ruinas.
La entrada al balneario es de 20 pesos por adulto y 10 por niño.
LAGUNA DE CUJULIAPAN: En gobiernos anteriores esta emblemática área natural de Loma Bonita se puso de ‘moda’ cuando trataron de convertirla en un lugar ecoturístico, donde los pescadores ofrecieran sus servicios para empoderar la economía local.
Pero hoy, no hay nada de aquel intento, ninguna instancia de gobierno dio seguimiento y quedó abandonado, sin proyección.
MANGLE: Un famoso arroyo, ubicado en el camino que lleva a la comunidad de San Benito, fue borrado por un puente.
La obra pública era necesaria en las comunidades, no obstante, los accesos al arroyo son difíciles, a mitad del puente y solo a pie; la gente que desee visitarlo desde la cabecera municipal no encontrará un lugar donde estacionarse.
LA MACAYA: Un cuerpo más de agua que se ubica en la frontera de la colonia Mencho Pulido. Tiene un difícil acceso, donde la mayoría de las personas llegan caminando, buscando un poco de agua fresca.
Sin embargo, es un arroyo que también se nota en el abandono, gracias a que la zona es altamente peligrosa y debido a la inasistencia gubernamental.
PASO LA IGUANA
: Es de los pocos lugares que mantiene al ambiente agradable durante Semana Santa. Actualmente se encuentra limpio, cuidado y con capacidad para recibir a los visitantes. Este sitio se ubica a tan sólo 15 minutos de la cabecera municipal con rumbo a Tlacojalpan.
PASO VIEJO Y QUITA CALZÓN: Es uno de los sitios más concurridos, sin embargo, su acceso sigue siendo difícil; el caudal es limpio y transparente, pese a que se encuentran en una propiedad privada, la gente va en bici, autos y a pie para refrescarse ante la ola de calor que siempre se siente en Semana Santa.
ARROYO PANCHO: Un arroyo que se encuentra en completo abandono. Ya muy lejos están los días donde las personas caminaban hasta allí; hoy la naturaleza ha retomado su sitio y el caudal es libre.
DOS AGUAS: También localizado a menos de 2 kilómetros de la colonia Frumencio Pulido, y donde existe un manantial que alimenta al río de Obispo, pese a ello, a ser agua que sirve para el consumo humano, las personas no dejan de tirar basura, signo de que la gente camina hasta ahí para disfrutar de un paisaje y al mismo tiempo destruirlo.
No obstante, en todos hay un común denominador: la basura, la falta de conciencia de los visitantes; platos, vasos, botellas, envolturas de galletas y sabritas contaminan el paisaje natural que han hecho daño a la fauna del lugar.
En virtud a lo anterior, urge que Loma Bonita rescate esos espacios naturales y los explote turísticamente con un proyecto que garantice sus cuidados y seguridad.