Redacción El Piñero |
La tarde de ayer, Apodaca, Monterrey, registró un hecho natural poco común en la zona, que dejó a su paso muerte, múltiples daños e inesperadamente, una vida.
Un tornado y una tormenta, dejaron inicialmente daños en una nave industrial, de donde salieron volando varias láminas que amenazaron la seguridad de la gente que ahí trabaja. Además, 12 tráileres volcaron, lo que demuestra la increíble fuerza que tomó el tornado.
Una vez que regresó la calma, se confirmó que dos personas lamentablemente murieron. La primera, una mujer identificada como Rocío Dovanet Morales, de 32 años, fue levantada por el viento y azotada contra una estructura metálica. Otro hombre, de 40 años, fue aplastado por un árbol que sucumbió ante la fuerza del tornado.
Además se informó que durante el desastre natural, miembros de Protección Civil Jaguares auxiliaron a una mujer con el nacimiento de su hija en el medio de la tormenta que provocó varias inundaciones en calles y carreteras.
La bebé que nació fuera de las instalaciones de Protección Civil, junto a su madre, fueron reportadas por los Jaguares como estables y fueron trasladadas inmediatamente a un Centro Médico del Instituto Mexicano del Seguro Social.
El fenómeno estuvo acompañado también por intensas lluvias y granizadas que causaron encharcamientos y daños menores, pero que sin duda crearon un ambiente hostil para la gente de los municipios Monterrey, Apodaca, San Nicolás, Escobedo y Pesquería.
En redes sociales, se volcaron mensajes de ánimo para las personas y familias de las localidades mencionadas que pudieron resultar afectadas por el clima de la tarde, o que lamentablemente perdieron a alguien.