Al menos tres personas perdieron la vida en un ataque armado en el bar “Kabasca”, ubicado en la colonia Santa Julia de Irapuato, la noche del 14 de octubre y la madrugada del 15 de octubre. Este violento incidente, que representa el segundo ataque a un bar en menos de cinco días, ha desatado una fuerte movilización de cuerpos de seguridad tras el reporte de múltiples detonaciones.
Testigos relatan que un grupo de hombres armados ingresó al establecimiento y disparó a quemarropa contra los presentes. Elementos de la Policía Municipal, Guardia Nacional y Ejército mexicano llegaron rápidamente, acordonando la zona e implementando un operativo para dar con los responsables.
En el lugar, se hallaron al menos diez casquillos percutidos, mientras peritos de la Fiscalía del Estado iniciaban las investigaciones pertinentes. Sin embargo, hasta el momento, no se ha informado sobre detenciones relacionadas con estos crímenes.
La situación en Guanajuato se torna cada vez más crítica. Los tres niveles de gobierno se encuentran totalmente rebasados en una geografía donde la vida no vale nada. Diariamente, balaceras, ejecuciones y secuestros son el pan de cada día. ¿Y las autoridades? Bien gracias. La impunidad y la violencia parecen ser la norma, dejando a la población en un estado de constante temor.