Redacción El Piñero
Oaxaca, Oax.- Durante el violento desalojo de manifestantes en el Palacio de Gobierno de Oaxaca, los Policías Estatales ocuparon gas lacrimógeno que afectó a civiles inocentes, entre ellos turistas extranjeros, otro tropiezo de la cuarta transformación.
El hecho se registró la tarde de este miércoles primero de marzo, cuando un pequeño grupo de habitantes del municipio de Santiago Xiacuí mantenía tomado el Palacio de Gobierno.
Supuestamente los manifestantes se negaron a entablar diálogo con las autoridades estatales y mantenían secuestrados a burócratas.
Se desconoce a qué funcionario se le ocurrió la idea de emplear a Policía Estatales para desalojar a los manifestantes, mismos que lanzaron gas lacrimógeno en pleno Zócalo capitalino.
Decenas de civiles que no tenían nada que ver en el conflicto resultaron afectados por el gas lacrimógeno en su sistema respiratorio y ojos.
Ciudadanos oaxaqueños y turistas extranjeros fueron las víctimas colaterales del desalojo mal planeado, un grave tropiezo de la administración de Salomón Jara, la pregunta es a quién se le ocurrió esta pésima idea.