Oaxaca de Juárez.- Sucede muy frecuente en la capital del estado oaxaqueño, los integrantes de la mal vista sección 22 se organizan para crear sus barreras sociales, físicas y engrosar las académicas para poder tratar de manipular al gobierno estatal, chantajeando, sobajando y hasta reduciendo a las autoridades civiles, mientras que se ganan la enemistad de la ciudadania entera, excepto, claro está, de sus familiares y uno que otro despistado que aún cree a pies juntillas lo que alegan los lideres de la sección 22.
Sin embargo, su propuesta de libertad de expresar sus enojos vía una manifestación a todas luces no aprobada y soportada por los ciudadanos de a pie, de esos que cada día deben trabajar para ganar su dinero y no depender de los recursos federales que llegan sin importar que pase, sin importar quienes caigan, sean niños o adolecentes, excepto claro está; los mismos profesores de esa sección.
Compañeros reporteros de distintos medios han, hasta estos momentos reportados diversas agresiones hacia sus corresponsales, pareciera, que esconde la sección 22 algo, pareceria, que no están exigiendo derechos o doblegando obligaciones, sino, por el contrario, haciendo algo al límite de la ley, o fuera de ella.
Y es que cada reportero gráfico que se acerca, es amedrentado, corrido literalmente, so pena de romper sus implementos de trabajo; ofensas soeces, vulgares, como si los que las hicieran no tuvieran contacto con la educación, como , si fuesen individuos paraleos a esos que se hacen llamar “maestros”.
La libertad de prensa es necesaria, y mas para aquellos que se sienten incomprendidos, marginados sociales o simplemente desean manipular las acciones de sus congregaciones…
Pero el miedo nace cuando las acciones son tendientes a lastimar, a lacerar o a bloquear caminos de crecimiento; ¿que esconden? ¿cuanto hay que ocultar para incluso amenzar con lastimar físicamente a los reporteros gráficos?
Esperemos que el magisterio, ese grueso o mayoría que no son como los que se han acomodado cómodamente en las calles de la capital a lacerar el devenir diario de sus ciudadanos, tengan un mejor horizonte para nuestros niños, el verdadero futuro de Oaxaca