Redacción El Piñero
Oaxaca, México.- En el meollo del agitado escenario político-ambiental de Oaxaca, ocurrió la retención de Víctor Cata, secretario de cultura del Gobierno estatal.
De acuerdo a reportes periodísticos, los acontecimientos se desencadenaron en la carretera 190, en un punto preciso, la localidad conocida como Unión Zapata, donde individuos enmascarados interceptaron al alto funcionario.
El traslado forzado de Cata, como si de un botín de guerra se tratara, no se detuvo en su carretera de asfalto, sino que lo llevó a los predios de la antigua municipalidad de Mitla, donde ahora se encuentra retenido, a merced de fuerzas ocultas y motivaciones que escapan a la superficie.
Este no es un episodio aislado, sino el eco de un malestar en ebullición en las entrañas del estado. Los habitantes de estas comunidades, hastiados y desesperados por la inacción de las autoridades frente al violento fuego que arrasa sus tierras, han decidido alzar la voz de la protesta. En sus demandas, reverberan las exigencias de una respuesta más vigorosa, más decidida, capaz de enfrentar el desafío ardiente que devora los alrededores de Mitla y Telixtlahuaca desde tiempos inmemoriales.
Las calles, antes testigos mudos de la rutina cotidiana, ahora son escenario de barricadas y bloqueos, erigidas como monumentos a la frustración y la ira contenida. Los pobladores, protagonistas de una batalla desigual contra el elemento desbocado, claman por la llegada de refuerzos, de aeronaves dispuestas a surcar los cielos en defensa de sus hogares y sus tierras. Sin embargo, estas súplicas, lanzadas al viento como oraciones desesperadas, parecen haber caído en oídos sordos, en mentes distantes e indiferentes.
La tragedia de Oaxaca, tejida con los hilos de la negligencia y la indolencia, clama por una respuesta urgente y contundente. Mientras tanto, Víctor Cata, atrapado en las fauces de la incertidumbre, aguarda en su cautiverio, un símbolo de la impotencia de un gobierno que parece haber perdido el rumbo en medio del torbellino de la crisis.