Redacción El Piñero | Corresponsalía
La fructuosa es el azúcar que contienen las frutas, la miel y algunos vegetales, también está presente en muchos productos industriales como refrescos, jugos y dulces.
Las personas que padecen intolerancia a la fructuosa tienen dificultad para digerir este azúcar debido a que el intestino delgado no puede absorber bien, nos comparte la experta en nutrición, Ana Hernández.
Esto provoca síntomas digestivos bastante incómodos como hinchazón, gases, dolor abdominal y diarrea, entre otros, que aparecen después de comer alimentos ricos en fructuosa.
La intolerancia no se debe confundir con la intolerancia grave a la fructuosa o fructosemia hereditaria que es una condición genética más severa.
La intolerancia a la fructuosa se diagnóstica con prueba de hidrógeno, o también el médico puede eliminar de tu dieta la ingesta de fructuosa por un tiempo para ver si los síntomas mejoran o desaparecen.
Algunos vegetales que contienen este azúcar son manzanas, peras, sandía, o alimentos procesados que en su composición cuentan con jarabe de maíz alto en fructuosa.
Hay otros vegetales como las fresas, frutos rojos, zanahoria y pepino no contienen este azúcar o la tienen en un porcentaje muy bajo.
La nutrióloga Ana Hernández indica que si alguien sospecha que puede padecer de intolerancia a la fructuosa se recomienda consultar a un especialista.