Redacción El Piñero/PIÑATAZO
Loma Bonita, Oaxaca.- Tal vez de las pocas afirmaciones que se la he escuchado a Felipe Reyes y que se ha cumplido para todos la sociedad de Loma Bonita es: ” No me interesa la seguridad”, declaración emanada de un diálogo que sostuvo con el director de este diario, Roberto Hernández Torres.
En el diálogo se tocaron diferentes temas, sin embargo, cuando llegó el turno de la seguridad Reyes Álvarez fue tajante: la seguridad no entra dentro de sus prioridades, ya que hacer obras que llenen los ojos de las personas y que sirvan como justificante de su incesante deseo de ayudar al prójimo es y seguirá siendo lo más importante.
En Loma Bonita existen 56 policías municipales, para una población cercana a 40, 000 personas en la zona urbana, eso quiere decir que, a cada policía le toca cuidar a unos 715 cristianos, aunado a que sólo existen cuatro patrullas para cubrir todas las colonias que integran la población y la zona rural.
Es una tarea casi imposible para la corporación policiaca, que más allá de tratar de cuidar al pueblo con los que tiene, se ven obligados a servir COMO paramédicos, rescatistas sin la capacitación adecuada.
Los ciudadanos siguen siendo víctimas de robo de bicicletas, dinero en efectivo, robo a casa habitación, y muchas otras cosas que ya no se denuncian porque cumplir con el deber de ciudadanos en la mayoría de las veces se convierte un viacrucis por la justicia que muy pocas veces llega.
Felipe Reyes ha demostrado tener la capacidad de gestionar recursos, porque él mismo lo pregona, millonarias e históricas gestiones para el desarrollo de Loma Bonita, sin embargo, se ve corto de pensamiento o no lo quiere hacer a la hora de priorizar las necesidades primarias.
Es cierto que el paisaje urbano del pueblo ha evolucionado en la última década, no obstante, Loma Bonita nunca ha vivido del turismo, no necesitamos tener un paisaje moderno, se necesita seguridad, que los delitos del fuero común desaparezcan para que así se empiece a consolidar el proyecto de una ciudad moderna que atraiga visitantes, porque la situación del país ha orillado a las persona a visitar lugares que garanticen su seguridad.
A nivel nacional, Loma sigue siendo reconocido como un lugar piñero, pero también como el lugar donde mataron a cuatro personas al interior de una tienda comercial, donde ocho hombres son ejecutados mientras cazaban conejos.
Hoy en día, nadie fuera del municipio, reconoce a Loma por lo moderno del parque o por las calles pavimentadas. El camino al progreso empieza por garantizar seguridad a los tuyos.