Oaxaca, México; 13 de mayo, 2017.-El objeto llamaba la atención, su diseño aerodinámico le permitia verse como un avión de esos que presumen las grandes potencias, sus aerodinamismo te hace pensar en futurismo, en velocidad… un momento… ¿que avion es ese?
Se llama Pegasus, 100% de origen mexicano, diseñado para ser un avión entrenador, su linea aeordinámica recuerda perfectamente a los aviones de combate que solemos ver en las películas.
Oaxaca Aerospace es la empresa que detalló cada elemento del avión Pegasus, debiera decirse que es el segundo protipo, y que ha contado con el apoyo de CONACYT, Universidades del sector privado y apoyo de capital inversionista.
México es ahora uno de os 4 destinos tecnológicos referentes a la aeronautica, ha crecido exponencialmente frente a otros paises que ya han tenido históricamente espacios ganados en esa ala tecnológica.
Rodrigo Fernanedz Gonzalez, Director General de Oaxaca Aerospace comenta para agencia informativa Conacyt ” Justamente en 2011 comenzamos a trabajar en el desarrollo, el creador, el fundador de la empresa es mi padre, el señor Raúl Fernández y él siempre tuvo la inquietud de hacer una aeronave; empezó con la idea y poco a poco fue agarrando forma hasta que en 2011 sometimos el proyecto ante el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) que nos apoyó con recursos a través del Programa de Estímulos a la Innovación (PEI)”.
Detalló que en esta segunda participación en la Famex, la empresa arriba ya con un segundo prototipo, mientras que el inicial, presentado hace dos años, se encuentra ya en fase de pruebas en pista. “El trabajo que arrancó en 2011 obedeció a la etapa de diseño y en 2013 logramos el primer prototipo (…) Ese primer prototipo se encuentra en pruebas de aceleración ya en pista y pruebas de timón, así como rotaciones ligeras despegando la rueda delantera”.
Añadió que para la siguiente etapa del primer prototipo, se encuentran a la espera de la autorización de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) para realizar las demás pruebas que básicamente consisten en las rotaciones de la parte delantera del avión, y al concluirlas y crear los reportes esperarían la autorización para las pruebas de levantamiento de la aeronave, las cuales estima se lleven a cabo a finales de este año.
– ¿Por qué avanzamos a un segundo prototipo si el primero aún está en etapa experimental?
-Pues bien, este diseño lo venimos trabajando desde el principio, de hecho el diseño que traemos hoy es el que pensamos cuando concebimos la idea; no obstante, comenzamos de otra manera porque el primer prototipo es, por decirlo de alguna manera, más barato porque en esa etapa el peso del proyecto consistió en el desarrollo tecnológico y se necesitaba hacer modificaciones constantes.
Estimamos que sea hasta dentro de un año cuando el segundo prototipo esté concluido, ahorita estamos a un cincuenta por ciento de avance, estamos utilizando un material de prueba (fuselaje de fibra de vidrio y piezas de exhibición) pero queremos fabricar el fuselaje con materiales compuestos en colaboración con la Universidad Aeronáutica en Querétaro (Unaq) para después dar paso a la integración de la tecnología del primer prototipo con el diseño del segundo.
JÓVENES OAXAQUEÑOS, LAS MANOS DETRÁS DEL AVIÓN
En entrevista exclusiva con la Agencia Informativa Conacyt, Óscar Habib Ponce de León Uribe, supervisor de diseño para Oaxaca Aerospace, explicó las etapas que ha seguido el desarrollo del segundo prototipo de Pegasus. Al respecto, enfatizó la idea de que el primer prototipo obedeció a la necesidad de concretar desarrollo tecnológico, mientras que el segundo consiste en el perfeccionamiento de la tecnología y del diseño para llegar a un producto comercial.
Al referir las etapas que siguió el proyecto, dijo que la idea inicial del dueño, Raúl Fernández, fue construir pequeñas aeronaves de entrenamiento para pilotos, ante lo cual conformó un equipo de jóvenes ingenieros que trabajaran en su desarrollo.
Al comenzar este trabajo, afirmó que dieron continuidad al primer prototipo, es decir, una aeronave biplaza, pero con mejores prestaciones, de hecho buscaron igualar y mejorar las prestaciones del Grob o del Pilatos en cuanto a diseño y desempeño se refiere.
Explicó que en la siguiente etapa trabajaron en el cambio a material compuesto ya que el primer desarrollo fue totalmente en aluminio y ahora cuentan con fibra de vidrio, pero están ya muy avanzados para cambiar ese material a fibra de carbono. El trabajo incluyó, entre otros, la construcción de un motor más grande y la inclusión de un tren retráctil.
“Estamos hablando de un trabajo de desarrollo tecnológico muy importante en el que nuestros ingenieros se han metido de lleno a la elaboración de las piezas, hemos generado desde nuestros pistones hasta las piezas más mínimas del motor. Son casi cinco años de trabajo desde que comenzamos la construcción del primer prototipo hasta ahora”.
En el proyecto, dijo, están involucradas alrededor de 30 personas, pero han participado muchas más, la mayor parte de Oaxaca, pero también cuentan con colaboraciones de personas de otros estados a través de las universidades con que tienen convenios.
Con información de http://www.sinembargo.mx/12-05-2017/3215706
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