- El sueño, a su alcance
Barandal
Luis Velázquez
Veracruz.- EMBARCADERO: En su twitter, los días de Pepe Yunes Zorrilla son así:
“Saludo a las mujeres guerreras.
Sigue tu corazón y sigue dibujando tu vida.
Definimos el rumbo de la historia.
Para gobernar Veracruz se necesita carácter.
Felicidades a Zitta Pazzi en su cumpleaños”.
Etcétera.
De entrada, dice el politólogo Carlos Ronzón Verónica, parece un anecdotario de la revista “Corín Tellado”, más que la bitácora de un candidato priista a gobernador.
Y en contraparte, dice el profe, en la percepción ciudadana hay la sensación, la creencia (y aun cuando Pepe lo ha rechazado) de que Enrique Peña Nieto habría pactado el triunfo electoral en Veracruz de José Antonio Meade con el gobernador Yunes, mientras y a cambio estaría amarrada la victoria de Miguel Ángel Yunes Márquez en las urnas.
Desde luego, se trata, se insiste, de una percepción, porque ni modo que luego de tantos años de soñar con el trono imperial y faraónico, Pepe haya renunciado a su legítimo sueño en una carrera progresiva y ascendente que lo ha llevado de presidente municipal y diputado local y federal a Senador de la República, pasando por la presidencia del CDE del PRI, y la candidatura a jefe máximo de la tierra jarocha.
PASAMANOS: Una realidad fuera de debate está clara: Pepe Yunes es el mejor candidato de los cuatro aspirantes.
Es un político con la mejor biografía pública.
Es un hombre con una fama de honradez “a prueba de bomba”, no obstante los cargos desempeñados.
Nunca, jamás, un escándalo ni un reality-show.
Es el más decente y respetuoso de la dignidad humana.
Un político moderado y mesurado en el tiempo huracanado y turbulento que se ha vivido en la tierra jarocha desde hace unos 7 años y medio.
Pero. al mismo tiempo, oh paradoja, la mitad de la población priista y la otra mitad se pregunta dónde está el piloto.
Se ve, pero no se siente.
Y más por la siguiente circunstancia.
CORREDORES: El profe Carlos Ronzón lo disecciona:
A: Todos los seres humanos, igual que Pepe Yunes, acarician un sueño. Sueño legítimo.
B: De pronto, zas, Pepe tiene el sueño de su vida (gobernar Veracruz) en su mano, a su alcance.
C: Y al mismo tiempo, por más vueltas y vueltas que se le dan a los hechos y circunstancias, pareciera que Pepe sigue viviendo en gerundio, es decir, planeando el futuro.
D: Y más cuando el sueño es un sueño familiar.
E: En la antesala del sueño aterrizado (el primero de julio), la mitad de la población priista y la otra mitad indecisa espera acciones concretas y específicas.
F: Y mientras “El chiquis” y “El Cui” (así quisieron denominarse ellos) se mueven, con todo y el limbo electoral, bajo perfil para evitar desaguisados, hay la percepción de que el candidato priista se quedó en los años 80, cuando Fidel Velázquez Sánchez, el perpetuo líder sindical de la CTM, acuñara la frase bíblica de que “quien se mueve está canijo salga en la foto”.
En contraparte, Ronzón Verónica mira que José Antonio Meade y Mikel Arriola, candidato a Jefe de Gobierno en la Ciudad de México, se han dado una sacudida espectacular y van remontando el vuelo.
RODAPIÉ: Un político, como Yunes Zorrilla, candidato a la gubernatura, ha de saborear el sueño logrado, de igual manera como los seres humanos gozan el momento de la victoria, ya el equipo de futbol, ya el boxeador, ya el académico presentando un libro, ya la flor más bella del ejido cuando es coronada, ya el cantante de rock en su último concierto, por ejemplo.
Pareciera, sin embargo, que el candidato priista va camino al Gólgota. Cargando cruz pesada.
Por ejemplo:
Resulta inverosímil que más allá de la decencia, en los 40 días de la precampaña nunca, jamás, mencionó por su nombre al gobernador ni tampoco a su candidato, el primogénito, sobre el
Veracruz adolorido, cuando, caray, de cara al Golfo de México, la población, los ciudadanos, la militancia, quieren sangre en el ruedo.
Y más, cuando de por medio está el río de sangre y el valle de la muerte en que se ha convertido “la noche tibia y callada”.
Calla el candidato rojo. Pero su silencio parece un silencio pesado, obligado, digamos, por circunstancias duras. Adversas. Una de ellas, el clamor de la percepción social, la gubernatura pactada para “El chiquis” y Los Pinos para Meade en un estado como Veracruz una de las cuatro reservas electorales del país.
El Estado de México, para Meade.
La Ciudad de México, para Morena o el PRD.
Jalisco, para el Movimiento Ciudadano con el dantista Enrique Alfaro.
Y Veracruz (ni hablar Meade la necesita) para Meade a cambio de ungir a “El chiquis”.
El (presunto) pacto anterior, dice Ronzón, ya corrió por todo Veracruz y está ultra contra súper posicionado.
BALAUSTRES: La esposa de Pepe Yunes lo dijo con claridad: “Es el mejor. No hay otro”.
Ronzón dice que el PRI puede ganar, porque es el único partido con estructura electoral de norte a sur y de este a oeste de Veracruz. Y del país.
Además ni “El chiquis” ni “El Cui” son imparables ni tampoco los candidatos priistas quedaron muertos luego del duartazgo.
Y más, porque una cosita es Javier Duarte y compañía y otra la verticalidad de Pepe Yunes.
Pero en política, dice el profe, lo peor son la duda y el rumor. Y más, cuando hacen mella, y permean, en la militancia.
Y más, cuando un senador, Héctor Yunes Landa, de igual manera como en el año 2016, se está, o parecer estarse comiendo todo.
El piloto, el capitán de la nave roja, ha de asestar un manotazo. Sus valores, sus principios, sus ideas, su honestidad, su eficacia, están más allá de la simple percepción.
Pero, bueno, el proverbio bíblico lo establece sin rodeos: “La mujer del César ha de ser y parecer”.
Pepe Yunes ha de cuidar nombre y prestigio.