Guerrero, México.- Circunstancialmente y por sus propios medios, el corresponsal de La Jornada, Sergio Ocampo Arista, uno de los siete periodistas que el 13 de mayo fue privado de su libertad y despojado de su equipo de trabajo, teléfono celular y de su camioneta, por unos 100 hombres armados cerca de Acapetlahuaya, encontró su vehículo el lunes pasado en un corralón vecino de la localidad de Palos Altos, a las afueras de Arcelia.
En el negocio, propiedad de Grúas Lázaro, se encuentran bajo resguardo varios de los vehículos que fueron incendiados o abandonados cuando los días 11 y 12 de mayo, grupos civiles y armados bloquearon la carretera Iguala-Ciudad Altamirano tras la llegada del Ejército a San Miguel Totola-pan en busca de los integrantes del grupo criminal Los Tequileros.
Sin embargo, a pesar de que algunos vehículos fueron llevados por las mismas autoridades estatales, el reportero no había sido informado de que su camioneta Jeep Patriot se encontraba en ese lugar.
Ocampo Arista informó que el lunes, cuando con otros reporteros acudió a La Gavia, San Miguel Totolapan a realizar una cobertura informativa, de regreso pasaron a tomar fotografías de los camiones incendiados durante los hechos de violencia del mes pasado.
Dijo que entraron al corralón de Grúas Lázaro donde circunstancialmente encontró la camioneta que le fue robada en el crucero hacia Acapetlahuaya, por cerca de 100 hombres armados que mantenían un bloqueo en medio de dos retenes del Ejército.
Explicó que el propietario de Grúas Lázaro dijo que se la habían entregado en resguardo, pero no quién ni cuándo.
El periodista lamentó que la Fiscalía General del Estado (FGE) no haya hecho nada, a pesar de que presentó la denuncia ante la Fiscalía Especializada en robo de vehículos.
El 14 de mayo, un día después del agravio a los periodistas, el gobernador Héctor Astudillo Flores dijo en conferencia de prensa en Casa Guerrero que tenía información de que los agresores fueron integrantes del grupo criminal La Familia Michoacana, y advirtió: “Lo ocurrido a los compañeros periodistas en Tierra Caliente es un acto inadmisible que no toleraremos y condenamos enérgicamente”.
Sin embargo, según Ocampo Arista, nunca se realizó ninguna investigación para localizar su vehículo ni tampoco para encontrar el equipo del resto de sus compañeros que fueron atracados.
Informó que aparentemente su camioneta se encuentra en buenas condiciones y solamente le quitaron el estéreo. Incluso informó que encontró la credencial de elector que llevaba el día que se la robaron.
El periodista demandó a las autoridades estatales que ahora cuando menos intervengan para que le devuelvan su vehículo ahora que ya se sabe dónde está.
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