- Caso Manuel Rosendo Pelayo
Escenarios
Luis Velázquez
Veracruz.- UNO. Otro perseguido político
De nuevo, la histórica lucha del bien y el mal. Los buenos, ajá, y los malos. Dios y el diablo. Ormuz y Arimán. David y Goliat. El último capítulo en la política de Veracruz es la yunicidad ante Manuel Rosendo Pelayo, el ex alcalde de San Andrés Tuxtla que con todo y denuncias penales en la Fiscalía se declara impoluto, ángel de la pureza, perseguido político, víctima de una represión, casi casi, hostigamiento y acoso.
Tan es así que, por ejemplo, las elites priistas lo han cobijado. Y han creído en su honradez “a prueba de bomba”.
“No te dejaremos solo” le han dicho en un discurso fogoso delante de sus compatriotas rojos.
Y es que Rosendo Pelayo los convenció de que el gobernador Yunes lo sigue y persigue por la vía penal porque semanas anteriores lo intentó convencer de traicionar al PRI y cobijarse en el PAN. Y dado su fervor patrio por el partido fundado por “El turco” Plutarco Elías Calles, entonces, provocó la furia de Miguel Ángel Yunes Linares.
Y ni modo, pobrecito, ahora vive el infierno, el mismo infierno que trae azorrillado a la mitad de la cúpula tricolor y a la otra mitad, tanto que unos están presos en el penal de Pacho Viejo, y otros prófugos, y otros, amparados, y otros más, sumisos y sumidos.
DOS. El ángel de la pureza
El ex presidente municipal de San Andrés Tuxtla se salió con la suya el año anterior. Impuso a uno de los suyos, al parecer, el secretario del Ayuntamiento, como candidato priista a la alcaldía.
Y perdió.
Pero en el camino se enfrentó con el cacicazgo de los Pérez Garay, el padre, qepd, y la madre, ex alcaldesa y ex diputada federal, y el hijo, ex legislador y alcalde sucesor.
Ahora, y en el palacio, Octavio Pérez Garay le ha descubierto documentos bajo sospecha, de tal manera que interpuso denuncias penales en la Fiscalía acusado de adjudicaciones directas de obra sin licitar y creación de empresas fantasmas.
La Fiscalía lo citó una vez y se puso muy gallo.
Lo citó la segunda ocasión y luego de hablar con sus asesores jurídicos decidió presentarse para declarar sobre las investigaciones en su contra.
Y ahí están.
En tanto, lloró en el hombro de la elite priista y creyeron a ciegas en su inocencia.
“No te dejaré solo” le dijeron.
Ni el diputado local, Vicente Benítez, ni tampoco el federal, Jorge Alejandro Carvallo Delfín, han levantado han “lanzado su espada en prenda” para defenderlo.
En todo caso, los tres son adversarios, mejor dicho, enemigos.
Y si alguna vez Fidel Herrera Beltrán y Javier Duarte lo treparon en el mismo barco, la Arca de Noé, ahora, cada quien su destino.
TRES. Tierra de caciques
Tierra de pasiones Los Tuxtlas. El temperamento político llevado al extremo. Los nombres de sus caciques lo dicen todo:
En el siglo pasado, Pedro Rivera Pavón, Carlos Silva Carvajal, Jorge Uscanga Escobar, Tomás Montoya Pereyra, Elías Miguel Moreno Brizuela y Nemesio Domínguez Domínguez.
Del siglo pasado a la fecha, los Pérez Garay, Vicente Benítez, Jorge Alejandro Carvallo Delfín y su padre, Jorge Carvallo, aquel que acuñara el apocalipsis diciendo que el diputado federal “es el hijo más ruin que he tenido”, todo, claro, alrededor de la política.
Claudia Acompa, Lady Gucci, y su esposo, panistas, dueños de la presidencia municipal de Santiago Tuxtla. Jazmín Copete y su hijo, los otros propietarios del Ayuntamiento.
Jorge González Azamar, cuatro veces alcalde de Catemaco, el edil récord Guinness, pues en cada ocasión en la silla embrujada del palacio por un partido político diferente. Y todavía de ñapa, su frustrada operación electoral para entronizar a su esposa en el mandato edilicio.
Y en medio de todos ellos, Manuel Rosendo Pelayo, declarándose el más impoluto entre los impolutos en un Veracruz con Javier Duarte acusado como el ex gobernador más pillo y ladrón en la historia nacional.
CUATRO. Primer exalcalde denunciado
Manuel Rosendo fue a la Fiscalía y declaró. Y del edificio, que antes fue arropado con luces de un antro, salió sonriendo, igual que Arturo Bermúdez Zurita, ex secretario de Seguridad Pública, preso en el penal de Pacho Viejo, acusado ahora de desaparición forzada.
La risa, claro, expresa muchas cosas. Entre otros sentimientos, cumpliendo la sentencia del profeta José López Portillo de que el país estaba a punto de convertirse en una nación de cínicos.
Hay, sin embargo, denuncia penal en contra del ex alcalde.
Y ante la ley habrá de responder. Y cada parte (el presidente municipal de San Andrés, los abogados de Rosendo Pelayo y hasta la Fiscalía) aportando pruebas, documentos, testimonios inapelables para demostrar la culpabilidad o la inocencia.
Por lo pronto, Rosendo es el primer ex alcalde de los 212 de Veracruz llevado a una denuncia penal.
Y la denuncia interpuesta cuando las pasiones políticas se atraviesan, diputando, claro, las 5 elecciones, pero más, mucho más, la gubernatura de 6 años.
Y por eso mismo, resultó fácil alardear que es un perseguido político de Miguel Ángel Yunes Linares, quien ha metido a la cárcel a tres ex gobernadores, a dieciséis políticos duartistas y a quince policías bermudistas.
La moneda está dando vueltas en el aire y nadie sabe el lugar donde caerá…
Dios y el diablo. Los buenos contra los malos. Ormuz y Arimán. David y Goliat, vaya el lector a saber.