- Prófugo de la justicia
Barandal
Luis Velázquez
Veracruz.- ESCALERAS: El duartazgo sigue echando chispas. Todo indica que el grado de corrupción trascendió más allá de lo inverosímil. Ni un sexenio alcanzaría al gobernador Yunes para proceder en contra de todos. Y más, porque según la lista de denuncias penales de la Contraloría y el ORFIS, la Fiscalía tendría que proceder a uno por día en contra de un duartista.
Además, de que en la tarea de justicia elemental también participan los jueces federales.
El penúltimo ramalazo lo asestaron unos jueces federales de Querétaro. Dos nuevas órdenes de aprehensión en contra de Moisés Mansur Cysneiros, el presunto presta nombre de Javier Duarte, uno de sus tres amigos favoritos, los más cercanos entre los cercanos, como también fueron Jaime Porres y Franky García.
“Moy” como le llamaban Duarte y Karime, fue acusado de defraudación fiscal, el mismo delito porque el que cayera a la cárcel el legendario y mítico narcotraficante de Estados Unidos, Al Capone.
Y más si se considera que nadie, absolutamente nadie juega con la secretaría de Hacienda y Crédito Público y el SAT, Sistema de Administración Tributaria.
Y ni modo que ahora los duartistas acusen a Miguel Ángel Yunes Linares de persecución política.
PASAMANOS: Moisés Mansur fue un ministro sin cartera en los casi seis años de Javier Duarte y Karime Macías.
Compartió honores y privilegios y abundancia con Jaime Porres y Franklin García, que formaban parte de aquella guardia pretoriana del ex gobernador preso en el Reclusorio Norte de la Ciudad de México, sujeto a proceso penal por varios delitos, entre ellos, delincuencia organizada y lavado de dinero.
Mansur Cisneyros era uno de los hombres de la absoluta y total confianza.
Tan es así que, y como se sabe, estaba encargado, entre otras cositas, de pagar cuentas millonarias de Karime, además de comprar bienes materiales en México y en el extranjero.
El gobernador Yunes ha contado la reunión estelar que tuvieran, parece, en Canadá, luego de varios plantones.
Entonces, Yunes le dijo que encarcelaría a su esposa por delitos cometidos en contra del erario de Veracruz y Mansur se puso a llorar y fue entonces cuando se volvió un Judas, el Judas de Duarte.
Y hasta Yunes lo habría perdonado.
Ahora, sin embargo, los jueces federales de Querétaro se le han aparecido.
Ya antes, le habían girado una orden de aprehensión /carpeta FED/SEIDE/UEI-DFFVER/0000691/2016) también por un fraude al fisco por 12 millones 456 mil 918 pesos en el ejercicio 2014.
CASCAJO: La justicia federal está atrás de Mansur Cysneiros. Acumula tres órdenes de aprehensión.
Desde el 14 de octubre del año 2016 lo consideran prófugo de la justicia, tiempo en que un juez de control de la Ciudad de México instruyó su primera captura por delincuencia organizada y lavado de dinero (Reforma, Abel Barajas, 23 de marzo), los mismos delitos que tienen a Javier Duarte “mordiéndose uno y el otro” según él mismo dijera.
Pero según las versiones, Moisés Mansur habría presentado el 23 de febrero un amparo en contra de las tres órdenes de aprehensión ante el juez tercero de distrito en Amparo Penal de la Ciudad de México, Augusto Octavio Mejía.
La vida, pues, tan rara, extraña y misteriosa. Y fascinante, claro.
Casi seis años, Mansur y sus amiguitos “merecieron toda la abundancia del mundo”.
Y ahora, llevan quince meses viviendo, digamos, en el infierno, desde que el gobernador Yunes tomara posesión.
Por lo pronto, los duartistas del primero y el segundo y el tercer círculo del poder seguirán habitando el peor de los mundos hasta el 30 de noviembre cuando el Yunes azul termine el mandato constitucional.
Pero si el primogénito gana la gubernatura, entonces, la pesadilla se prolongará 6 años más.
RODAPIÉ: A veces, los expedientes penales en contra de los duartistas parecieran una película de terror y de horror.
Por ejemplo:
Las denuncias penales en contra de 315 ex servidores públicos acusados por el presunto desvío de 48 mil millones de pesos según el contralor Ramón Figueroa Piñera se antojan el peor cuento infernal de Agatha Christie.
También parecieran una novela fantasmagórica las 139 denuncias penales del Órgano de Fiscalización Superior en contra de igual número de funcionarios por clavarse 29 mil 879 millones de pesos.
Y ni se diga el calambre del ORFIS a 120 ex presidentes municipales acusados de irregularidades en la última Cuenta Pública.
Por eso, quizá, y tiempo atrás, en una feria del libro en el Palacio de Minería, los novelistas y cuentistas, Carlos Fuentes Macías y Gabriel García Márquez, anunciaron que dejarían de escribir ficción porque la realidad es más fascinante que la invención.
Pero con todo, pero mientras cada parte queda en su lugar, la capacidad de asombro sigue vigente.
POSTES: El caso de Moisés Mansur tiene, además, otro ingrediente. El mismo nació “en pañales de seda”. Pertenece a una familia pudiente. Nada necesitaba de la vida, pues todo lo tenía. Tan es así que hasta rejoneador era.
Ahora, prófugo de la justicia. Además, y todo indica, huyendo en el extranjero.
Incluso, los mismos jueces federales han precisado que “en caso de ser extraditado, no podría llevar los procesos en libertad”.
Es decir, la cárcel lo espera.
Y es que “el delito de delincuencia organizada prevé la prisión preventiva de oficio”.
La pesadilla duartista sigue dando vueltas.
Ni un día huyendo, ni un día en la cárcel, ni un día en la zozobra valen por los 6 años de gloria que todos ellos usufructuaron.
Lo más importante en la vida es la paz y la tranquilidad.