Playas de Coatzacoalcos, cementerio de la mafia

•Durante este fin de semana, deportistas que practicaban ejercicios encontraron restos humanos en dos hechos distintos
•Desde 2015, la delincuencia usa la dunas costeras para sepultar a sus víctimas

Ignacio Carvajal
blog.expediente.mx para El Piñero de la Cuenca

Personas que hacían deporte en la playa de Coatzacoalcos, frente a la colonia Almendros, localizaron una bolsa con restos humanos en avanzado estado de putrefacción.
Apenas el viernes pasado otro grupo de deportista encontró el cuerpo de Silverio Cruz Jiménez, quien apareció tirado en la costa, con una gran herida en el cuello.
Los deportistas pensaron que era una persona que había sufrido ahogamiento, por lo que se acercaron a tratar de ayudar, llamaron a la policía, confirmaron que no tenía signos vitales, además, llevaba un cortada profunda en la garganta.
A 48 horas de ese hallazgo, ahora son un par de bolsas negras las que aparecen en la zona de playas, con restos humanos.
En una de las bolsas negras, que estaban semi sepultadas en las dunas, encontraron restos óseos en avanzado estado de putrefacción.
En la otra bolsa, estaban prendas de vestir de hombre y una licencia de conducir a nombre de Enrique Gracia Esquivel, originario del estado de Sonora.
En relación a este caso, en octubre del 2016, en el fraccionamiento Playa Sol, fue asesinado el taxista Flavio Gracia Esquivel, de 41 años, oriundo del estado de Sonora.
En ese entonces, los restos de Flavio fueron reclamados por su hermano Enrique Gracia Esquivel, cuya licencia de manejo apareció junto a la osamenta.
Enrique Gracia viajó en esas fechas desde el estado de Sonora para reclamar a su hermano y darle sepultura.
Se desconoce si fue en ese mismo contexto en que se dio su muerte, sin embargo, el avanzado estado de putrefacción de la osamenta, lo vinculan por lo menos en la temporalidad.
Ya en el pasado, los predios cercanos a las playas de Coatzacoalcos han estado en la mira de los colectivos de búsqueda por la presencia de fosas.
Desde el 2016, son más de cinco las jornadas de búsqueda que se han efectuado en predios de las dunas cercanas a la costa.
Estas jornadas se hicieron más intensas luego de la ejecución, en 2017, de Elías Aguirre Sánchez, El Metro, abatido por presuntos criminales rivales en la colonia Benito Juárez Norte.
El Metro había sido detenido en 2014 por presuntos delitos de portar armas, en sus declaraciones dijo a la policía que había matado y enterrado a varias personas en la zona de playas colindante a Punta Caracol, pero en ese momento no investigaron, se ignoraron los dichos del criminal.
Tras su ejecución, y al revisar su historial, se organizó la búsqueda y se localizaron tres cadáveres de personas que estaban reportadas como secuestradas.
A principios de octubre del 2017, dos mujeres aparecieron en una fosa sobre la zona de dunas, frente al aplana vecina de la última etapa del malecón de Coatzacoalcos, eran originarias de Las Choapas.
En febrero del 2015, la policía encontró seis cadáveres decapitados en una fosa en la colonia Veracruz, uno correspondía a una bailarina de un bar de moda de la ciudad. Los restos fueron sepultados en una fosa clandestina colindante con la playa de Coatzacoalcos.
En marzo de 2017, un hombre que había sacado a pasear a su perro a la playa, se llevó tremendo susto cuando el canino trataba de comer la carne putrefacta de una mano que se asomaba entrene la arena. Al dar parte a las autoridades fueron exhumados dos cadáveres.
En lo que va del año, en Coatzacoalcos han asesinado a 44 hombres y mujeres, lo que representa menos de la mitad de lo registrado en el mismo periodo en 2018, año que cerró con 169 homicidios y feminicidios. El 2017, en tanto, tuvo 139 y 57 en el 2016.
En el sur de Veracruz, en especial en Coatzacoalcos, se han lanzado diversas estrategias para luchar contra la delincuencia, sin que hasta ahora presenten resultados notorios.

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