Luis Velázquez Malecón del Paseo
23 de marzo de 2019
EMBARCADERO: Otra vez de los caminos del sur viene la sublevación social en Veracruz ante la ola avasallante de violencia… Incluso, nadie dudaría que ellos se antecedieron a los brotes de cólera social en otros pueblos como por ejemplo, en Soledad Atzompa y Mariano Escobedo… En Tatahuicapan, el presidente municipal, Esteban Moctezuma, lo ha ultra contra súper confirmado… Hay en el pueblo guardias comunitarias que iniciaron, primero, combatiendo los secuestros a partir de cuando los carteles secuestraron a un joven, y ni modo, el paso inmediato fue sitiar el municipio de por sí en la indignación crónica pues allí fue construida la presa Yuribia…
ROMPEOLAS: Después, las guardas comunitarias extendieron el servicio social al servicio patrio para combatir el huachicoleo, tiempo aquel, sexenios priistas y panistas, cuando el mundo estaba consciente de la venta de combustible robado en las carreteras sureñas, sin que ninguna autoridad levantara la voz… Y por el contrario, haciéndose tonta y guaje… Aquí, en Tatahuicapan, recordó el alcalde, “somos de armas tomar”… Y, por tanto, han tomado las armas para defender el legítimo derecho a la vida en un Veracruz donde van 90 secuestros, más 502 asesinatos, y entre los cuales se anotan 52 feminicidios.
ASTILLEROS: En el pueblo sureño, enclavado en la sierra de Soteapan, hay apenas un total de catorce policías… Y aun cuando a los polis municipales se han añadido algunos policías de la secretaría de Seguridad Pública resultan insuficientes para garantizar, dije el alcalde, el llamado Estado de Derecho… Y por eso mismo, con la bendición superior, y desde hace ratito, se integraron en guardias comunitarias… Todos, juntos, velando por la vida cada día y cada noche y cada amanecer cuando, y por lo regular, los demonios están más sueltos…
ARRECIFES: En Coatzacoalcos, el pueblo vive amotinado, incluso, enviando cartitas a la ONU y trepando la Plataforma Change.org cartas de solidaridad, mejor dicho, de un frente común en contra de la incertidumbre… En un pueblo del Valle de Uxpanapa, municipio de Minatitlán, la población linchó a un hombre que baleara a su esposa por los celos enloquecido… En Atzompa, los vecinos lincharon y quemaron vivos a 6 malandros…
PLAZOLETA: En Mariano Escobedo, los vecinos advirtieron al presidente municipal que ladrón que detengan le cortarán las manos… En Maltrata, los vecinos se amotinaron frente a la comandancia cuando los jefes policiacos pretendían liberar a dos malandros de una escuela con la advertencia de que si los dejaban en libertad los lincharían… En Xalapa, los vecinos detuvieron a un ladrón de coches y entregaron a la policía… En la ciudad de Veracruz, los vecinos de una colonia popular detuvieron, desnudaron, amarraron de pies y manos y dejaron en la calle a un par de ladrones y avisaron a la policía para que fuera por él… Ahora, en Tatahuicapan, las guardias comunitarias…
PALMERAS: La cólera social se va extendiendo ante la reacción tardía de la autoridad que, se aplica, o de lo contrario, será rebasada… Y lo peor, evidenciada ante y/o en el gobierno central del altiplano, allí donde manda el presidente de la república, AMLO, el tabasqueño, que tanto sabe de los alcances, fuera de control, de la pasión popular… Lo más canijo es que la población organizada siga haciéndose justicia por mano propia ante un gobierno desconcertado, atónito, sin saber qué hacer como cuando en la película de “El candidato”, Robert Redford gana en las urnas y angustiado pregunta a uno de sus asesores “Y ahora ¿qué hago?”…