OAXACA, Oax. (proceso.com.mx).- La escritora Elena Poniatowska se negó a opinar sobre las aspiraciones presidenciales de la panista Margarita Zavala porque “yo estoy con Andrés Manuel López Obrador y voy a seguir con él, no voy a chaquetear a estas alturas porque él conoce el país como nadie”.
Sin embargo, aclaró, “yo no digo que sea San Andrés Manuel, no le rezo, pero cuando él dice primero los pobres, no miente, sí es verdad y de veras conoce el país, entonces, para qué opino si voy a votar por López Obrador”.
Antes de presentar su libro Las indómitas en la 36 Feria Internacional del Libro de Oaxaca (FILO-2016), a la activista y periodista mexicana ganadora del Premio Cervantes 2013 se le preguntó sobre las aspiraciones de Margarita Zavala y si México está preparado para tener presidenta, reiteró:
“Yo estoy desde el 2006 con Andrés Manuel López Obrador, lo escogí a él o él me escogió a mí, como sea, entonces, para qué opino si voy a votar por López Obrador”.
Al insistirle si ser la esposa del expresidente Felipe Calderón le ayudaría a ser la presidenta de México, hizo como que no entendió al ironizar, “que, qué, que Calderón la va a matar a ella (en clara alusión a los miles de muertos que se cometieron en el sexenio del panista, lo que desató risas)”.
Luego respondió seria: “Pues no sé, yo creo que ella piensa que le ayuda un chorro (ser la esposa del expresidente de Felipe Calderón), pero está súper equivocada”.
Entristecida por la muerte del gran caricaturista, extraordinario dibujante y artista Rogelio Naranjo y por la enfermedad que le aqueja a Sergio Pitol, comentó su pesar porque se están muriendo los grandes críticos de la sociedad urbana y de lo que sucede políticamente en nuestro país.
Respecto a la derrota de Hillary Clinton, manifestó que el mensaje que se mandó es que se quiere romper con cierta continuidad como sucedió con los Kennedy, quienes fueron muy poderosos, como la pareja de los Clinton que fue muy poderosa, todos ellos demócratas.
“Era como romper con una tradición primero del marido (Bill Clinton) y luego de la esposa (Hillary) y muchos latinoamericanos y mexicanos votaron por Donald Trump, no se entiende, (aunque) se podría decir que la cercanía de Trump con el mandatario ruso Vladimir Putin jugó un papel importante porque siempre hay terror a una guerra entre Rusia y Estados Unidos, son los dos grandes enemigos de la historia”, añadió.
Sin embargo, considera que en realidad “es la gran victoria del dinero, el dinero que es el que impone las leyes, y también las impone en México. Es el gran triunfo del blanco, de lo que significa ser blanco en Estados Unidos, sabemos todos que sí hay racismo, rechazo y sexismo y nosotros somos racistas en contra de nosotros mismos”.
En cuanto a su libro Las indómitas que comprende nueve ensayos sobre mujeres que han sido invisibilizadas a lo largo de la historia, como las soldaderas, luchadoras sociales o activistas, Poniatowska, dijo que “en México se evade a las mujeres y las dejan fuera de la historia y se les olvida”.
Entonces, confiesa que “casi de manera inconscientemente, porque ni siquiera fuera un propósito sino por una emoción, siempre he escrito sobre mujeres, escribí sobre Tina Modotti y Frida Khalo, antes de que se volviera un icono y que se volviera más venerada que la Virgen de Guadalupe, de Lupe Marín, la esposa olvidada de Diego Rivera y sobre las siete cabritas como Elena Carro, Nelly Campobello, entre otras”.
En este nuevo libro aparecen las soldaderas porque sin soldaderas no hay Revolución mexicana porque los soldados hubieran desertado, sin embargo, las borraron completamente porque las llamaban colchones de tripa o les ponían nombres despectivos”.
Ya en la presentación de su libro como parte de las actividades de la 36 Feria Internacional del Libro de Oaxaca (FILO) y acompañada de la periodista oaxaqueña Carina Pérez García, Poniatowska habló sobre esta obra surgida de su personal experiencia como mujer, al haber sido puesta en lugares menores a los del hombre, sobre todo durante su juventud e inicios como periodista y escritora.
Sobre la forma en que eligió los personajes e historias que forman Las indómitas, Poniatowska dijo que “ellas me eligieron a mí, porque desde que me inicié como periodista, hace muchos años, en 1953, fue una gran lección porque entré a un mundo desconocido que era casi exclusivo de hombres”.
“Habíamos muy pocas mujeres, y refundidas en una sección que aún existe en los periódicos llamada Sociales, donde los empresarios sacan a sus hijas casaderas para ver quién se las lleva, ¡como un kilo de jamón!”, continuó la escritora arrancando las risas a los asistentes con su particular sentido del humor.
“A las mujeres les daban muy poca importancia. Las periodistas debían tener muy buena presentación. Entonces la mujer era como un objeto y sigue siéndolo. Las que persistimos nos dieron reportajes, nos permitieron viajar. Aún a mis más de 80 años sigo siendo reportera”, apuntó.
Continuando con el tema de las mujeres inmersas en ámbitos donde aún rige el hombre, sobre todo en el periodismo, Poniatowska declaró “tengo una enorme admiración por Carmen Aristegui, que ha sido maltratada y perseguida por denunciar una injusticia, la famosa Casa Blanca de La Gaviota”.
Al respecto, agregó que merecemos una buena información o una información crítica, no lo que nos quieren decir, que es finalmente lo que nos quieren esconder”, puntualizó la autora, quien continuó ahondando en temas políticos y de género para finalizar con una sesión de preguntas y respuestas del público.