De la corresponsalía
Oaxaca, México.- Padres de familia y maestros de la escuela primaria Benito Juárez del municipio de Niltepec, en la región del Istmo de Tehuantepec, informaron que debido a las fuertes lluvias de los últimos días, 10 aulas provisionales que fueron reconstruidas a raíz del sismo del 7 de septiembre del año pasado, no resistieron las precipitaciones y presentan goteras.
Por lo que exigieron a las autoridades educativas se brinde mantenimiento a las aulas móviles o bien acelerar la reconstrucción de la escuela, para no afectar a los menores con la falta de clases.
Señalaron que desde el viernes pasado, los alumnos han tenido que recibir sus clases en medio de goteras, ante el riesgo de que puedan contraer alguna enfermedad que pueda surgir a consecuencia de acudir a las aulas en esas condiciones, dado que no es un espacio seguro ni saludable, pues hay charcos de agua al interior del salón y los pisos están mojados.
Dijeron que por el sismo del 7 de septiembre del año pasado, varias escuelas colapsaron y los alumnos en el Istmo de Tehuantepec perdieron muchas clases, por lo que no es conveniente que se suspendan las actividades, sin embargo no existen las condiciones necesarias pues los niños no pueden estar en medio del agua.
Los padres de familia pidieron a las autoridades educativas que a la brevedad se le brinde mantenimiento a las aulas móviles, o bien se acelere la reconstrucción de la escuela para no continuar afectando a los estudiantes con la pérdida de clases a pocos días de finalizar el ciclo escolar, “es urgente que nuestra escuela se reconstruya lo antes posible, no es saludable para los niños estar tomando clases en medio del agua”, agregaron.
Explicaron que después del sismo, la escuela primaria Benito Juárez del municipio de Niltepec tuvo que ser demolida y se reconstruyeron 10 aulas provisionales, las cuales resultaron mal ya que gotean lo que ha generado la preocupación tanto de padres de familia como de docentes por los pequeños que cursan los primeros grados y que tendrán que padecer los contratiempos a causa de los malos trabajos de construcción en las aulas.
Mencionaron que lo grave, es que la reconstrucción de la escuela hasta la fecha presenta un avance del 50 por ciento y de acuerdo a los encargados de la obra no cuentan con presupuesto suficiente para seguir construyendo las aulas, por lo que se corre el riesgo de que los trabajos no se concluyan antes del inicio del nuevo ciclo escolar, dado que a la aulas les hace falta instalación eléctrica, detalles en las paredes, piso y ventanas.
Reprocharon el mal trabajo realizado por quienes estuvieron a cargo de la construcción de las aulas provisionales pues éstas gotean y los más afectados son los estudiantes, por lo que exigieron al Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (Ieepo) y al gobierno del estado destinar los recursos suficientes para concluir a la brevedad la escuela y evitar riesgo de enfermedades por las condiciones que presenta el plantel.
La institución cuenta con un total de 160 estudiantes repartidos en 10 grupos los que asisten de lunes a viernes, y son atendidos por 14 trabajadores de la educación, 10 maestros frente a grupo, un administrativo, un director y dos trabajadores de apoyo.
Señalaron que es lamentable que a casi tres meses de que se cumplan un año del sismo del siete de septiembre, fecha en que cientos de escuelas fueron afectadas dejando sin aulas a miles de alumnos en el Istmo de Tehuantepec, hoy continúen en las mismas condiciones recibiendo clases en forma irregular y en espacios que no son dignos de una buena impartición de educación, en el estado.
Lo anterior, pese a que hace unos días, autoridades educativas de Oaxaca y una comisión de padres de familias de la región del Istmo de Tehuantepec firmaron un acuerdo para que a partir del lunes 18 hasta el jueves 21 de junio de comienzo la construcción y reconstrucción de las más de 2 mil escuelas dañadas en esta región, debido a que las autoridades educativas no habían liberado los recursos del Fondo Nacional de Desastres (Fonden) y por lo consiguiente no se había aplicado a la reconstrucción.
Agregaron que aún hay cientos de alumnos en varias escuelas que tienen aulas habilitadas con lonas, estructuras metálicas o de madera y que han sido derribados por las fuertes lluvias de los últimos días, además de que reciben clases en forma deplorable e inadecuada para los menores de edad, situación que va a empeorar, ya que de acuerdo a las autoridades de Protección Civil de Oaxaca, las lluvias continuarán en las próximas horas.
Cabe señalar que a principios de junio, Héctor Gutiérrez de la Garza, director general del Instituto Nacional de la Infraestructura Física Educativa (Inifed), afirmó que en el próximo año escolar que arranca en agosto, todos los planteles estarán listos, no obstante, en el resto de los estados, dependerá de cada autoridad local que los planteles queden sin riesgo para el ciclo 2018-2019.
Sin embargo, reconoció que en algunas entidades, el avance ni siquiera alcanza el 62 por ciento, como Chiapas, donde sólo 33 por ciento de las escuelas afectadas están siendo atendidas; Oaxaca con 35 por ciento; Puebla con 30 por ciento; y Guerrero con 40 por ciento.