Tener uñas amarillas no es normal, podría tratarse de una infección y hasta una enfermedad crónica
Las uñas pueden decir mucho sobre tu salud y cuando hay un cambio en sus colores y texturas, podrían alertarnos sobre una enfermedad. Por ello, te decimos qué significa tener las uñas amarillas.
Muchas veces, esto surge como respuesta a una infección por hongos que puede solucionarse rápidamente, pero en otros casos, podría indicar enfermedades graves como la psoriasis o la bronquitis crónica.
Uñas amarillas
Las uñas amarillas no son normales, por lo que si aparece este cambio en tus manos, no debes considerarlo algo simple. Toma nota de los problemas de salud que podrían alertarte y acude al médico de inmediato:
1. Psoriasis
Uno de los síntomas más frecuentes de la psoriasis con las uñas amarillas. Esta enfermedad crónica causa lesiones graves en la piel de áreas visibles como la cara y las manos, incluyendo las uñas.
Muchas veces puede confundirse con hongos, lo que hace que el paciente se automedique y empeore el problema. Lo mejor es que acudas al médico si detectas cambios de color en las uñas, escamas, enrojecimiento o inflamación alrededor de las mismas.
2. Síndrome de uñas amarillas
Existe un padecimiento llamado síndrome de uñas amarillas, el cual de acuerdo a Mayo Clinic, sucede cuando las uñas se engrosan y el crecimiento es más lento, además de que hay una decoloración amarillenta de las uñas.
Las uñas afectadas con este síndrome también pueden perder la cutícula y desprenderse en algunas partes.
En general, este problema puede ser signo de una enfermedad respiratoria, como la bronquitis crónica.
3. Linfedema
Otra de las causas relacionadas con las uñas amarillas es el linfedema, una inflamación principalmente en las manos y tobillos ocasionada por una obstrucción del sistema linfático, según la Biblioteca Nacional de Medicina de los EE.UU.
4. Problemas de tiroides
Pocos lo saben pero los cambios hormonales que surgen con los problemas de tiroides también pueden generar un cambio de color en las uñas, especialmente a un tono amarillento.
Las uñas demasiado frágiles también pueden alertar problemas de la glándula tiroides.
5. Infecciones
Esta es la causa más común de las uñas amarillas. Mucha gente desarrolla una infección por hongos y bacterias en algún momento de su vida y aunque no son graves, pueden ser incómodas y difíciles de tratar.
Las infecciones por hongos en las uñas se desarrollan poco a poco y provocan que la uña se vuelva descolorida, amarillenta, gruesa y distorsionada.
Aunque es más común en las uñas de los pies, también puede presentarse en las manos.
Ya lo sabes, no descuides la apariencia de tus uñas y si notas cambios que no mejoran en algunos días, debes acudir al médico, pues podría tratarse de algo grave que requiere tratamiento.
Con información de BBC y Vix