Jaime GUERRERO
Oaxaca.- Las secretarías de Energía (SENER) a la de Economía (SE), así como a la Comisión Reguladora de Energía (CRE) y a la Procuraduría Federal del consumidor (Profeco), deben coordinarse y realicen los trabajos necesarios para frenar el aumento del precio del Gas Licuado de Petróleo (LP), debido que en el 2017, ha se incrementado hasta en un 36.5 por ciento.
De acuerdo con el reporte de la Comisión Reguladora de Energía (CRE), el costo promedio del hidrocarburo que debieron pagar los consumidores en el mercado mexicano osciló en 15.05 pesos por kilogramo, cifra que representa un aumento de 16.5 por ciento en comparación a los 13.35 en los que se vendió en diciembre del año pasado.
Y con la liberación de los precios, cada región ya tiene un precio que es definido por los distribuidores, bajo el argumento de cubrir los costos del gas, transporte y logística.
En algunos estados de la República el aumento ha sido significativo, tal es el caso de Baja California Sur donde el gas LP se vendió en un máximo de 19.3 pesos por kilo, cifra que representó un aumento de 33.6 por ciento. En este rango también se encuentra Quintana Roo con precios de hasta 18.6 pesos por kilo, que significó un alza de 36.5 por ciento, para los consumidores.
En la Ciudad de México, el energético se vendió en un máximo de 15.6 pesos por kilogramo, casi 20 por ciento más, mientras que en el Estado de México la cotización oscila en 16.3 pesos, equivalentes a un aumento de 23.4 por ciento.
Por lo pronto, el diputado del PRD, Felipe Reyes Álvarez, urgió al gobierno federal, intervenir para detener el incremento a la tarifa de venta final de gas LP en México, y con ello evitar más afectaciones a la economía de las familias del país, ya que durante este año hay aumentos de hasta 36.5 por ciento para los consumidores domésticos.
El legislador exhortó a las secretarías de Energía (SENER) a la de Economía (SE), así como a la Comisión Reguladora de Energía (CRE) y a la Procuraduría Federal del consumidor (Profeco), para que en el ámbito de su competencia y de manera coordinada, accione para frenar el aumento.
Reyes Álvarez, refirió que en el 2015 el gobierno federal puso en marcha un decálogo en el cual se daban a conocer los beneficios que se supone se generarían con la reforma energética, donde algunos sería visibles a partir de este año.
En el decálogo se indica principalmente que bajaría el precio de la luz eléctrica y del gas; la apertura de la industria eléctrica permitirá que fluyan grandes inversiones al sector; más recursos para el presupuesto y programas sociales; que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y Petróleos Mexicanos (Pemex) se fortalecería para generarle acometividad a nuestro país; y que la reorganización de la industria eléctrica sería para garantizar tarifas competitivas a los hogares.
Recordó que el gobierno federal, aseguraba que los precios de los energéticos iban a reducirse. “Incluso que, fue el presidente de México quien informó que no se darían aumentos mensuales a las tarifas de gasolina, diésel y gas LP, pero en algunas entidades los precios están por encima de los registrados por la CRE”, cuestionó.
Demandó entonces a la SE y a la CRE, establecer mecanismos para reducir los precios de venta de primera mano de Pemex, y con ello se puedan generar condiciones de mercado competitivo de venta final de gas LP, todo en beneficio de los consumidores.
Y a la Profeco para que inicie un programa de verificación de estaciones de servicio, de calibración de básculas a las empresas prestadoras de servicio de gas LP, y de ser necesario proceda a efectuar las infracciones y sanciones que correspondan.