Jaime GUERRERO
Oaxaca.- Con el fenómeno de canícula, se presentará menos lluvia y más calor, en el territorio oaxaqueño. Se prevé que la precipitación pluvial, disminuya alrededor del 35 por ciento, situación que puede ocasionar daños a la actividad agrícola, principalmente en el cultivo de maíz y frijol señaló el meteorólogo de la Coordinación Estatal de Protección Civil, Cutberto Ruiz Jarquín.
La intensidad de este fenómeno natural puede variar dependiendo de la región del país.
En el caso particular del estado de Oaxaca, con excepción de 2017, ha estado presente en los últimos 25 años.
Aún cuando la canícula trae como consecuencia el incremento de la temperatura, ésta no alcanzará valores tan altos como los que se presentan durante la temporada de estiaje en donde, en la zona del Istmo de Tehuantepec, llegó hasta los 45 grados.
La canícula se refleja con un estrés hídrico en las plantas y cultivos supeditados al temporal de lluvias. De la misma manera, se refleja en el nivel de las presas, ríos y otros cuerpos de agua.
Sin embargo, Ruiz Jarquín, aseguró que anterior no quiere decir que las lluvias se van a ausentar; puede haber eventos extremos meteorológicos de corta duración que puede generar precipitaciones en corto tiempo.
“No descartamos la posibilidad de que en algún momento pueda caer una tormenta o evento meteorológico que pudiera poner en riesgo algunas regiones del estado”, declaró Ruiz Jarquín.
Aunque no es posible determinar con exactitud la fecha de inicio de la canícula, la CEPCO calcula que ésta se estableció en territorio oaxaqueño desde la semana pasada y permanecerá hasta mediados de agosto.
Algunos investigadores asocian la canícula con el fenómeno del Niño, dos eventos naturales que “son completamente diferentes”, dijo. El fenómeno del Niño, agregó tiene una frecuencia de ocurrencia de cinco años, en tanto la canícula es recurrente cada año en el estado de Oaxaca.
Lo anterior -agregó- debe de llevar a las personas tomadoras de decisiones, a establecer nuevas formas de sembrar y regar para hacer cultivos resistentes a la sequía.
“Evidentemente con el fenómeno del calentamiento global y cambio climático no va a quedar exento de consecuencias el fenómeno de la canícula”, agregó.