:: El objetivo: concientizar a la ciudadanía sobre el respeto a señalamientos y no manejar a exceso de velocidad.
Tuxtepec, Oaxaca.- “De la oficina a la calle” es una campaña que puso en marcha el Gobierno Municipal de Tuxtepec a través del Instituto Municipal de la Juventud que promueve la concientización de la ciudadanía y sobre todo de los jóvenes para evitar accidentes viales.
En esta actividad de campo, se platica con los conductores de automotores, bicicletas y peatones para hacerles ver la importancia de respetar los señalamientos viales, no manejar a exceso de velocidad y al peatón para que cruce la calle por las esquinas y sobre la línea amarilla que es el camino que debe de seguir para llegar de un lado al otro de la calle.
A los motociclistas se les conmina para que usen casco, que las luces de sus transportes funcionen adecuadamente y a no viajar más de dos personas sobre este tipo de unidades, para no poner en riesgo a otras personas que viajen con ellos.
Si queremos eficacia en la mejora de la seguridad y la reducción de accidentes viales, deberemos dedicar nuestros máximo esfuerzo en la preparación de los ciudadanos, y esto sólo se puede conseguir con la educación vial.
Si bien la campaña va dirigida a la población en general, es primordial generar conciencia en los jóvenes, involucrarlos y hacerlos partícipes de las acciones que el Gobierno Municipal genera para el bien a todo el municipio.
El Instituto Municipal de la Juventud, dejo claro que el entorno social en Tuxtepec es fundamental en todo procedimiento educador, que un entorno social cívico hace más cívicos a los ciudadanos, y un entorno social preocupado por la seguridad vial hará que los ciudadanos tengan un comportamiento vial más responsable.
Cuando se pretende conseguir cambios de comportamiento debe hacerse con una acción doble y simultánea: sensibilización de todos los ciudadanos a través de campañas específicas de divulgación, para convencerles de la importancia de evitar riesgos cuando se mueven en la vía pública como conductores, usuarios o peatones y a la vez, disciplina para evitar que los que no quieren hacer caso de los mensajes sigan poniendo en riesgo al resto de ciudadanos.