Connect with us

“Reguero de cadáveres”; Primer libro de un cronista

El Piñero

Luis Velázquez | Malecón del Paseo
05 de julio de 2021

EMBARCADERO: Un cronista, Juan Eduardo Mateos Flores (Veracruz, 1991) ha publicado su primer libro… Se llama “Reguero de cadáveres”… Es un viaje al rincón más arrinconado del infierno… Cuenta la historia de la ciudad jarocha alrededor del narcotráfico en los días sombríos y sórdidos de los gobernadores Fidel Herrera Beltrán y Javier Duarte, preso en el Reclusorio Norte de la Ciudad de México, sentenciado a 9 años… La extensa y larga crónica de 233 páginas publicada por la editorial “Los libros del perro” es un texto seco y explosivo donde las cosas y los hechos y las personas son llamadas por su nombre, y por eso mismo, un riesgo, incluso, para la vida del reportero…

ROMPEOLAS: Hasta donde se recuerda, si se recuerda bien, escrito en primera persona, el cronista se vuelve un punto de referencia crucial dando cuenta de los hechos… Incluso, estando como testigo en el frente de batalla, como aquel 20 de septiembre del año 2011, el primero de Duarte, con los 35 cadáveres tirados en el paso a desnivel de la avenida Adolfo Ruiz Cortines, en Boca del Río, frente a plaza comercial Las Américas…

ARRECIFES: Allí estuvo el cronista y aquella tragedia permea de principio a fin del “Reguero de cadáveres”… Digamos, constituye el epicentro… Más, porque el joven reportero siguió la pista a los sucesos buscando, más que los molinos del viento, la punta del iceberg… Y aun cuando el libro narra el infierno desde Veracruz puerto, en la aldea global reproduce con fidelidad el mismo infierno de otras latitudes geográficas, como, por ejemplo, Nuevo León, Jalisco y Zacatecas, donde el tiradero de cadáveres se están dando a partir, dice el informe oficial, de un choque bestial entre los carteles y cartelitos para manejar y quedarse con las jugosas plazas económicas y con 14 y treinta cadáveres en un solo día…

ESCOLLERAS: El libro se lee, como dicen los estudiantes de la facultad de Letras, “de una sola sentada”… Y es, claro, un viaje truculento al infierno, donde a veces han de cerrarse un ratito las páginas para sentir y advertir que estamos vivos, sanos y a salvo… Más, cuando aquí se ha vivido desde hace casi treinta años (Patricio Chirinos Calero) en el fondo del precipicio… Por vez primera la historia del narco en una ciudad contada, pian pianito a partir de la gente involucrada…

PLAZOLETA: Un cronista atrás de los hechos subterráneos… En cada barrio y cada colonia…Las casas de seguridad “repartidas en la ciudad” donde concentraban a los secuestrados “para sacarles información y asesinarlos”… Los plagiados “golpeados con tubos y palos hasta la muerte” en tanto los sobrevivientes “encerrados en un contenedor para que murieran asfixiados”… Datos, detalles, ubicaciones, personas, que por vez primera aparecen publicados y que, bueno, significan un riesgo… Y por eso, la admirable valentía del cronista… Valentía e integridad para “contar las cosas como son” y/o como fueron, digamos, en el ejercicio pleno de la libertad…

PALMERAS: Impresionan, avasallan, impactan los hechos narrados en “Reguero de cadáveres”… Por ejemplo, cuando describe la llegada a la comandancia policiaca de un convoy de camionetas… “Sacaron a todo el personal al patio… Los encueraron… Los obligaron a ponerse de rodillas”… Y les leyeron la cartilla de quiénes eran los nuevos jefes de plaza… Es un libro estrujante… Más porque muchas de las personas y personajes desfilando en sus páginas están vivos… Juan Carlos Mateos Flores ingresa a la literatura con el viaje a un infierno llamado Veracruz…

Comentarios

Comentarios

Comentarios

Entradas Relacionadas