Redacción El Piñero
Veracruz, México.- La mañana de este martes –18 de junio– en el mercado municipal 5 de febrero de San Andrés Tuxtla, Veracruz, el comerciante Jorge Luis Zapata Páez perdió la vida luego de una confrontación con policías municipales.
Lo anterior se desencadenó cuando las autoridades intentaron remover escombros de la calle Manuel A. de la Cabada, frente al mercado en proceso de reconstrucción, a pesar de un juicio de amparo interpuesto por los locatarios.
Según relatos de testigos y videos compartidos en redes sociales, la situación escaló rápidamente después de que policías municipales intentaron confiscar el celular de Zapata Páez, quien transmitía en vivo la discusión entre comerciantes y autoridades locales. Posteriormente, fue detenido por un grupo numeroso de agentes y subido a una patrulla.
Tras su detención, el comerciante fue llevado al Hospital Civil Dr. Bernardo Peña, donde lamentablemente llegó sin vida, según confirmaron sus compañeros del mercado. La noticia de su fallecimiento provocó una reacción inmediata entre los comerciantes, quienes se dirigieron al Palacio Municipal para exigir justicia.
En respuesta a los eventos, policías ministeriales han detenido a ocho agentes municipales y un estatal presuntamente involucrados en los hechos. El acceso al Palacio Municipal fue restringido por las autoridades locales ante la llegada de los manifestantes, quienes continúan exigiendo esclarecimiento y justicia por lo sucedido.
Este incidente ha generado una profunda consternación en San Andrés Tuxtla.
Hasta el momento, las autoridades locales no han emitido un comunicado oficial detallando las circunstancias exactas que rodearon la muerte de Jorge Luis Zapata Páez, situación que mantiene a la población a la espera de respuestas concretas y acciones que aseguren la transparencia y rendición de cuentas en este lamentable suceso.
COMUNICADO DE LA SEGOB
En virtud de los hechos del día de hoy en el municipio de San Andrés Tuxtla, se nos solicitó la intervención a fin de mantener la seguridad y tranquilidad de la población.
Y evitar así mayores altercados que causaron estragos poniendo en riesgo a más personas ajenas a los eventos suscitados.
Conminamos a las partes a privilegiar el diálogo y a seguir los cauces institucionales para que continúen su curso legal en el caso particular del fallecimiento de una persona. Todo hecho se investigará conforme a derecho por parte de la Fiscalía General del Estado.